Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo, tanto monta, monta tanto, vendían sus ‘burras' en ‘El País' y ‘Público'. Y es que tocaba publicitar la huelga "más necesaria de la democracia
El domingo los Blues Brothers de la mamandurria ‘liberada’, el dúo Sacapuntas sindical, se dejó caer por partida doble en los periódicos por excelencia de la ‘izquierdona’. Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo, tanto monta, monta tanto, vendían sus ‘burras’ en ‘El País’ y ‘Público’. Y es que tocaba publicitar la huelga «más necesaria de la democracia«, ésa que «va a tener mucho impacto», decía Méndez (al que ahora no le suena El Chaflán… ¡qué cosas!) porque «nunca, en la historia de la democracia, un Gobierno ha tratado de atacar por tantos frentes a la vez los derechos sociales y laborales de los trabajadores como ahora». En cuanto al compañero Toxo, se curaba en salud con una fórmula obscena: «No contemplo un fracaso de los sindicatos; sería de la sociedad española». Lo complementaba Méndez en el periódico de Jaume Roures: «Es un envite de los demócratas, no de los de derechas o de los de izquierdas. Nos la jugamos todos«. Por eso ha potenciado la unidad con los vídeos del ‘Chikilicuatre’, ¿no? ¡Anda ya!
CONTRA LA DERECHA
En realidad, se notaba demasiado que estos pájaros están preparando una huelga que no han tenido más remedio que sacar adelante. Al final, pese a no discriminar a gentes de izquierdas o de derechas -según su discurso- les salía el pelo de la dehesa. «Se han escuchado gritos de ¡Zapatero dimisión! pero yo he escuchado ¡Rajoy al Gobierno!», afirmaba Toxo a ‘El País’ mientras que en ‘Público’ clamaba contra lo que él consideraba una campaña contra los liberados. «Lo que la gente quiere es que Zapatero dimita de su actual avatar», le seguía Méndez en el mismo rotativo. Y si pensaban que no había recaditos contra la prensa que ha aireado algunas de sus miserias, o más bien sus riquezas, se equivocaban. Para eso estaba Méndez, al que se le podían leer estas declaraciones en ‘El País’: «El ataque tan virulento que sufrimos las organizaciones sindicales por parte de los que utilizan la libertad de in- formación en el fondo expresa que el PP tiene más preocupación que el Gobierno por el alcance de la huelga». Lo dicho. ¿Ven cómo la huelga del compañero Cándido es contra la oposición y no contra el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero? ¡Qué obsesión!
Y CONTRA TORRENTE
Aquí no se libra ni el apuntador. La crónica del periódico de Prisa daba cuenta de cómo los ‘zejateros’ se habían apuntado a la promoción de la huelga, con amplia presencia de ‘titiriteros’ diversos. «Entre el público hubo quienes criticaron a Santiago Segura, cuyo equipo seguirá filmando el 29 de septiembre escenas de ‘Torrente 4», podía entresacarse de la pieza. «Santiago Segura, ministro de Cultura», cantaban los estudiantes hace años, en los tiempos de José María Aznar, ante el Ministerio de Educación. Con lo que hemos visto, no caerá esa breva…
LOS BUENOS Y LOS MALOS
Un domingo más, ‘El País’ volvía a marcar la senda de los elefantes de lo que se está cociendo con ETA justo el mismo día que la escasamente casual entrevista publicada por ‘Gara’ . Ya les dijimos días atrás que el rotativo de Prisa estaba abonándose a esa pérfida construcción de la ‘ETA buena’ y la ‘ETA mala’. Luis R. Aizpeolea, depositario de arcanos como en el anterior ‘proceso’, dejaba muestra de ello: «Batasuna avanza más veloz que ETA» .Y eso sólo era el titular de un artículo que concluía con que «ETA sigue sin estar a la altura de las reclamaciones de su antiguo brazo político». Pero, ¿Batasuna no era ETA, según sentencia judicial? ¿Ha quedado anulada ésta?
MONTILLA, TRASTO VIEJO
El mismo periódico publicaba una encuesta -de ésas que a Maruja Torres ni fu ni fa- en la que el tripartito de José Montilla se venía abajo como un castillo de naipes. El mencionado aparecía en ‘Público’ con una entrevista donde ahora negaba lo evidente: «Nosotros no estamos ni con los separatistas de aquí ni con los separados de allí«. Eso,viniendo de un tipo que ha ido de la manita con Carod-Rovira y sus cuates, era para echarse a reír. «Mi deseo inequívoco es continuar dirigiendo la transformación de este país», declaraba. De traca.
FELIPE Y ROCA
Contaba en su singular y unilateral digital Enric Sopena que Felipe González «parece dispuesto a tener una fuerte presencia en Cataluña con motivo de las elecciones autonómicas» a través de la presentación de un libro suyo, ‘Mi idea de Europa’, y de otro que anda preparando de conversaciones con Miquel Roca. ¿Será Felipe el ‘tapado’ del que disponen los socialistas para no hundirse en la misera en Cataluña? Describía Sopena a Roca como un político que «nunca fue partidario del independentismo, cayó en desgracia de Pujol precisamente porque el entonces presidente de la Generalitat recelaba de su intensa proyección en Madrid y de su escasa dosis de nacionalismo». Un hombre que «sigue manteniendo su gran prestigio como político pragmático y eficaz» con el que «la deriva soberanista de Convergència -la de Artur Mas y su núcleo dirigente- no se habría producido». Es bonito comprobar cómo, con el tiempo, los juicios se atenúan. Y más cuando se recuerda cómo en otros tiempos Roca se las tenía tiesas con los Informativos de TVE que dirigía don Enric, cartas de protesta mediante.
SUSURRADORES VARIOS
En el mismo portal de Internet, Carlos Carnicero–La tragedia del Gobierno con la comunicación y la contratación de agencias internacionales— continuaba con el ataque de cabreo, esta vez a cuenta de la comunicación del Gobierno. «El presidente se ha fiado exclusivamente de un núcleo de personas relacionadas con la comunicación y de su entorno personal -Miguel Barroso, José Miguel Contreras, Antonio García Ferreras, Luis Fernández- que además eran desde hace tiempo íntimos amigos y que se protegían mutuamente en todos los sitios actuando como un grupo de presión laboral». Los susurradores de La Moncloa, como los bautizó Juan Luis Cebrián. Que para Carnicero no están dando los resultados esperados: «Independientemente de los beneficios obtenidos personalmente con el nacimiento de la cadena Sexta de televisión, la deriva ha llegado a un punto conocido por todos, como es el hecho de que Pedro J. Ramírez sea uno de los asesores más cercanos del presidente del Gobierno». ¡Tela marinera!
Originalmente publicado en La Gaceta



