Si de mi dependiera y llegara el caso, no me temblaría el pulso para publicar ABC sólo en edición digital
Su reto personal al frente de esta cabecera centenaria es permitir que ABC siga siendo referencia en el pensamiento de centro-derecha y saber, al mismo tiempo, aprovechar la oportunidad de llevar todos sus atributos a la era digital.
«Lo que ocurre es que todavía hoy el papel es el 80% de los ingresos de las empresas. Pero si en ABC.es tenemos entre 700.000 y 800.000 lectores no sé porque lo vamos a cobrar más barato que el papel. (…) Hay que empezar a decir que Internet es muy barato, sobre todo para el anunciante.»
Superar a El Mundo en número de lectores no es, confiesa Bieito Rubido, una obsesión personal. Pero el director de ABC sí tiene claro que
«En 2011 y 2012 van a cambiar muchas cosas en este país. Entre ellas está que cambiará el status quo de los medios de comunicación. Unos se reestructurarán, otros se fusionarán e, incluso, algunos desaparecerán. Y también ocurrirá que ABC será el primer diario de centro derecha de España porque no tiene esa transversalidad tramposa y oportunista a la que juegan algunos. ABC no va a jugar a eso».
De la campaña que Jiménez Losantos hizo en su día contra el diario ABC Bieito Rubido no quiere pronunciarse directamente porque «entre otras cosas aun no estaba aquí». Lo que sí sabe es que
«Cuando creas algo contra otra cosa no tienes mucha garantía de éxito. No se puede emplear un periódico o una organización contra nadie. Hay que crearlas a favor de algo. Y ABC es un periódico que está a favor. A favor de la sociedad española donde el idioma y la unidad son algunos de los valores que defiende».
Dice de su puesto como director de ABC que requiere una dedicación casi plena. Participa en algunos debates esporádicamente en La 10 (la televisión del grupo Vocento) pero su lugar natural es la redacción.
«La actualidad es caótica y, como tal, nunca sabes cuando tienes que hacer cosas. Por eso creo que tienes que estar en periódico. (…) Cuando un director de un periódico tiene un programa propio en televisión es que tiene que hacer muy pocas cosas.»