Mientras el bloguero de referencia de ‘Público’ cumplía con un telegrama, su director se marcaba un comentario
Esto no hay trasgo que lo aguante. Ya es la tercera o cuarta vez que los periódicos se me convierten en papel para envolver pescado por mor de las sorpresas del día.
Lo de la sorpresa es un decir: el adelanto estaba cantado o, como dicen los mercados, ‘descontado’. Y, hablando de los mercados, son estos, y no Zapatero o su ángel malo, Rubalcaba, el que ha convocado las elecciones generales para noviembre, si hemos de creer al comunista Gaspar Llamazares.
Su intervención en la red social Twitter no tiene precio:
«Legislatura negra de golpe de mercado, cirugía social y crisis de la democracia. Los mercados convocan elecciones anticipadas para noviembre»
Internet es una bendición, porque a nuestros políticos no les da tiempo a convocar a todos sus asesores de imagen antes de darle al ratón con la última ‘genialidad’ que se les pasa por la cabeza.
Luego está lo del día elegido, fuente de infinitas especulaciones y no menos comentarios irónicos: 20-N. ¡A quién se le ocurre hacer coincidir la llamada a las urnas con una fecha tan significativa, el Día Internacional del Niño!
¡Anda, qué coincidencia!
Alguna otra efeméride debe de darse el mismo día, porque ya se conocen estas como las ‘elecciones generalísimas’.
Para el presidente, ya lo sabemos, «es una fecha como cualquier otra», y como conocemos el carácter angelical de Rubalcaba, podemos estar seguro de que es así y de que, en caso de victoria del PP, nunca se referirán a ellos como «el Gobierno del 20-N», pueden estar seguros. Jesús Maraña, director de ‘Público’, es de los que se apuntan al sector ‘indiferentista’ en cuanto a la fecha.
Y ya que estamos con Maraña, he de decir que, en un día como hoy, entiendo que ‘Público’ suba en difusión mientras ‘El País’ baja. Mientras los ‘blogs’ del diario de Liberty, a las 6.30 del mismo día en que el presidente del Gobierno anunciaba un adelanto electoral a noviembre y su rueda de prensa era seguida por comparecencias de Mariano Rajoy y Alfredo ‘Ppunto’ Rubalcaba, seguían hablando de cosas como «¿Qué métodos para evitar las picaduras de mosquito son un engaño?» o «¿Apuntó a la más guapa?
El lado machista del asesino de Oslo», en la versión ‘online’ del diario de Roures el propio director demostraba cintura y agilidad marcándose un «Incertidumbres sobre el 20-N».
Eso, mientras su ‘bloguero de guardia’, Escolar El Chico, se limitaba a un telegrama con la noticia en su autosobrevalorado ‘blog’. Las cosas, como son.
Lo de Maraña es un comentario de urgencia, en siete puntos, lo que tiene su mérito, y trasluce que el diario de Roures, tanto tiempo contrario al adelanto, duda ahora sobre su conveniencia.
«Dice Zapatero que adelanta las elecciones para aportar ‘certidumbre política y económica’. Cuesta entender tal motivo, que habría sido igualmente válido hace dos semanas, cuando Zapatero creía que abrir un proceso electoral podía provocar «inestabilidad política y económica».
En cuanto a la reacción de Rajoy, Maraña es, ¿cómo decirlo?, poco partidario:
«Pese a haber sido informado con antelación, Rajoy se ha limitado a una introducción de manual y luego ha leído el discurso preparado, sin poder disimular el agobio de tener que soportar (contra su costumbre) una rueda de prensa con preguntas. Dice que gobernará «desde el centro, desde la moderación…», o sea, que se ve en la necesidad de aclarar que no comparte los mensajes extremistas y apocalípticos de parte de su equipo».
Quiero creer que la ingenuidad de Maraña es real. Esto es la política, estos son los socialistas y aquí nadie da puntada sin hilo. Rubalcaba ha hecho sus cálculos: cifras maquillables como buenas sobre el empleo, el efecto psicológico del atentado de Oslo, el ‘retrato ecuestre del amado líder’ apañado por el CIS y, probablemente, ‘buenas noticias’ del frente etarra.
Esperando un anuncio
En la cadena amiga, es decir, en la SER, Rubalcaba ha anunciado que fue él quien sugirió a ZP la fecha, como deja claro el propio titular:
«Rubalcaba: ‘Yo no le he pedido nunca al presidente que adelantara las elecciones»
¿Ven? Sólo hay que entender ‘rubalcabés’ para descifrarlo. Si don Alfredo dice «¡qué calor hace!», llévate el abrigo. En esa misma entrevista, insinúa esas ‘buenas noticias’ de que hablaba antes cuando dice, refiriéndose a los terroristas del hacha y la serpiente:
«Si no nos equivocamos, esto está acabado»
Eso no tengo que traducirlo, ¿verdad?
Y, a todo esto, el papel se queda para el final. Tampoco se pierden demasiado los lectores. ‘El País’ abre informando de que «José Luis Núñez, ex presidente del Barça, [ha sido] condenado a seis años de cárcel», junto a una de esas fotos que le encantan al diario de Liberty: un ¿actor? desnudo con un crucifijo en la entrepierna.
De este modo, una fotografía expuesta por la directora del Festival de Teatro Clásico de Mérida (¿?) que hubieran visto cuatro gatos puede indignar ahora a los católicos desde todos los kioscos, al tiempo que se juega al «qué intransigentes, estos católicos».
Poco importa que la responsable en cuestión haya retirado la obra, no por una demanda, sino por una serie de correos electrónicos, o que ‘El País’ se abstuviera de publicar las mucho más anodinas caricaturas de Mahoma. Y es que el Vaticano no emite ‘fatwas’.
Para ‘Público’, la noticia del día que no lo fue es:
«Desafío al Estado autonómico»
Se refiere, naturalmente, al PP. Gracias, Zapatero, ni un minuto tarde.
