Es un hecho paradójico, aunque perfectamente constatable, que la izquierda, que habla siempre en nombre del pueblo llano, odia con pasión todo lo que este ama y ama lo que el pueblo ignora. Hasta ha introducido un término para poder despreciar lo popular sin llamarlo así: comercial, con ese sabor a ‘los mercados’. Pero no puede desconocer que, en bienes de consumo, lo comercial -lo que vende masivamente- es, meramente, lo que le gusta a la gente.
En los medios, el fútbol suele plantearles un dilema: ningunearlo o, incluso, tratarlo con distanciamiento y objetividad es la muerte para cualquier publicación. Así que suelen jugar a dos barajas, dejando un forofismo indistinguible de una publicación del otro lado en portada y sus gruñidos elitistas en ‘Opinión’, sí, eso.
REIVINDICANDO LA TRISTEZA
Ayer seguí la fiebre posvictoria en la red social Twitter y vi cómo se cumplía el previsible guión del rojerío cenizo y el nacionalismo gruñón uniendo fuerzas para aguarnos la fiesta.
Para que se hagan una idea, los comentarios eran del tipo del lanzado por Escolar el Chico, don Ignacio:
«Cuando la final de la Eurocopa terminó, los incendios de Valencia todavía estaban allí».
Oh. ¿Y? ¿Eran estos los que ‘reivindicaban la alegría’? Pues no me los quiero imaginar jaleando la tristeza…
‘Diario Progresista’, por ejemplo, va de lado: «El Príncipe y Rajoy ‘chupan toda la cámara’ que pueden con la victoria de la selección de fútbol». Oh, esa era la noticia ayer, qué tontos todos los demás…
Por cierto, esta misma publicación online tiene un divertido titular:
Loza: «Si las víctimas quieren hacer política, que funden un partido». ¿Se acuerdan de cómo se ponían estos chicos de la progresía cuando alguien del otro lado sugería que si el 15-M quería hacer política podía convertirse en partido? Doble rasero: especialidad de la izquierda desde el siglo XIX…
La Tercera Información… Bueno, me había hecho el propósito, tras la muerte de Público, de darle más cancha al izquierdismo en Red pero, ¿de verdad hay algo que comentar en que «Cuarenta días para visibilizar y apoyar la necesidad de contrainformación en Galicia» sea la primera noticia? ¿No es su propia parodia?
Público.es no olvida que su patrón se hizo de oro con el fútbol y entiende, además, que el negocio es el negocio y dedica tema tras tema, todos en la página de inicio, a la victoria de la Selección Nacional a la que llaman, naturalmente, La Roja: «España celebra la Eurocopa en Madrid»; «Cibeles va a reventar con la selección»; «Iniesta, mejor jugador de la Eurocopa»; Prandelli: «España ha hecho historia y se lo merece»; «Iniesta, mejor jugador de la final»; «No ganamos, sacamos de quicio». A partir de las siete de la tarde, toda, toda su página de inicio se dedicaba al recibimiento de los futbolistas, minuto a minuto.
MÁS METAFORAS
Ya podía aprender ‘MásPúblico’, su rival en Internet, con su portada abriendo con «Latinoamérica frena a las multinacionales» (creo que con lo de frena se refiere al latrocinio organizado por los populistas).
Mientras, en su discretísimo blog del espacio rouresí, Arturo González, el hombre que «jamás entenderá que alguien sea de derechas», escribe «El orgasmo nacional«.
En este comentario llama al fútbol –en metáfora, oh, tan original– «la droga nacional despenalizada». Y sigue: «Los enanitos de rojo son nuestros gremlins, nuestro videojuego real. Da igual que te anuncien un ERE, da igual que si te pones enfermo más de 13 días con baja médica te echan por absentismo si quieren y sin indemnización, en el agravio más infame e intolerable que se ha cometido en todo el tiempo de democracia y de no democracia contra los trabajadores y que estos y los sindicatos ignoran y no existen medios de comunicación que expliquen y destaquen esta vuelta a la Edad Media, que se considere absentismo la enfermedad y que tengas que ir a trabajar para que no te despidan como si la salud dependiese de tu voluntad».
Vale, pasaré hoy por alto esa estúpida referencia a la Edad Media, quizá el periodo en el que los trabajadores han estado más consistentemente protegidos por los gremios, y me privaré de añadir que en el Siglo de las Luces estaban bastante peor.
Voy a su colofón: «Todo queda cegado por la euforia de Rajoy y el Príncipe celebrando cual horteras los goles en pie y gritando, ellos sí que son patriotas y de los buenos». No sé si el Príncipe y Rajoy son o no patriotas; sólo que González debería cuidarse esa úlcera: va a peor.
Lo más curioso de todo es que la izquierda es muy forofa de sus colores. En el Bluffington andan como locos con la campaña por la destitución –tardía, muy tardía– del Comisario Político de Televisión Española, Fran Llorente, el más sectario y servil al poder socialista de cuantos han pasado por la Corporación. «Nunca, jamás, recibí una instrucción política de Fran Llorente como director de Informativos de TVE«, empieza su tribuna Pepa Bueno. Claro, mujer. Y cuando, digamos, Zaplana o Matas dicen algo así, tú les crees sin mirar, ¿verdad, Pepa?
Lea La Gaceta y Periodista Digital.