El País y La Gaceta llevan la foto del enésimo desplante de Mas a Don Juan Carlos
Las portadas del 28 de septiembre de 2012 se dividen hoy entre quienes ven la botella medio llena o casi repleta y quienes consideran que apenas queda liquidez. Quien sea comprador habitual del ABC o La Razón, respirará aliviado porque ya se ve la luz al final del túnel y el Gobierno de Rajoy está trabajando por y para los españoles. Lo malo es observar el resto de diarios nacionales y entonces comenzarán las taquicardias y pensar que tal vez no todo es tan fantástico y tan maravilloso como se había vendido desde la competencia.
La presentación de los Presupuestos Generales para 2013 en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros fue interpretada en clave de perfecto optimismo para La Razón. «Deber cumplido», encima de la foto de Soraya Sáenz de Santamaría, reza el titular del rotativo de Paco Marhuenda ante unas cuentas durísimas para los españoles de a pie de cara al ejercicio venidero.
De hecho, sólo le ha faltado ponerle una corona de santa y solicitar a Benedicto XVI que canonicen a la vicepresidenta del Ejecutivo de Rajoy. Por cierto, si usted es asiduo jugador de loterías o de la ONCE vaya dándose prisa en afinar y sacar ahora los grandes premios porque dentro del paquete de medidas del Gobierno está el gravar con un 20% los premios superiores a 2.500 euros. De aquí a que se fiscalicen los premios de los bingos de las residencias de la tercera edad, sólo queda un paso.
ABC va también en la misma línea que su ‘gemela’ de La Razón. Escoge como titular una frase dicha por la propia Soraya, «Unos Presupuestos para salir de la crisis». La tijera gubernamental ya ha hecho su labor con vistas a los doce meses de 2013, pero incluso hasta en Bruselas creen que Rajoy se ha pasado un pelín en esta propuesta de dieta de adelgazamiento.
Ahora queda ver si los ciudadanos aguantan estas restricciones presupuestarias. La foto es un montaje de la vicepresidenta con un folio en la mano y donde se destacan los principales puntos fuertes de las partidas del año que viene. Tal es la adoración del rotativo de Rubido por las cuentas presentadas por Soraya que podía haber optado directamente por hacer un fotomontaje de ella con las tablas de Moisés y los Diez Mandamientos.
Lejos del optimismo canonizado de la prensa habitual de derechas, toca adentrarse en un baño de pesimista realidad, por ejemplo el que lleva El Mundo. Apuesta por un titular muy ‘televisivo’, pero nada original «Al filo de lo imposible». El diario de Pedrojota aclara que los números no salen porque pese a la caída del empleo, del consumo y de la pertinaz recesión que padece España, el Ejecutivo se ha empeñado en seguir incrementando la recaudación vía IRPF e IVA.
El País tampoco le hace la ola al gabinete de Mariano Rajoy, «El pago de los intereses de la deuda se come todos los recortes de gasto». Dicho de otra manera, esto es lo que se llama lo comido por lo servido y a lo mejor aún se produce un agujero mayor en el déficit que se quiere solventar a toda costa, pero pagando los de siempre, la clase trabajadora.
El rotativo de PRISA le concede también relevancia al nuevo paso pro independencia de Artur Mas y con una foto que llama la atención, la cara de Su Majestad el Rey totalmente descompuesta mientras Mas a su lado se troncha de risa en lo que ya es una indisimulada provocación en plena regla.
Y La Gaceta, clara, dura y directa; «Ciudadanos y empresa pagarán vía impuestos 4.375 millones más en 2013». ¿Qué diferente del titular de «Deberes hechos», verdad? El diario de Intereconomía no perdona media al Ejecutivo y habla de rejonazo fiscal y de que el gasto de los intereses de la deuda se come los ingresos derivados de la subida del IVA.
Lo dicho, para salir huyendo y no volver hasta el 1 de enero…de 2014. Si al final Juan Roig, el presidente de Mercadona tenía más razón que un santo, que lo mejor de 2011 era que iba a ser menos malo que la crisis de 2012 (y añádanle de la del 2013). La foto de La Gaceta es el acto celebrado en el Puerto de Barcelona donde Don Juan Carlos tenía que encajar el enésimo desplante y desaire de Artur Mas negándose a posar junto al monarca.