El País asegura que el PSOE tuvo que cambiar su campaña
Con compañeros de partido como Felipe González, quién necesita enemigos en el PP y en Izquierda Unida, deben de estar pensando Alfredo Pérez Rubalcaba y Elena Valenciano.
Hoy, 13 de mayo, la prensa recoge las declaraciones de los dirigentes del PSOE desmintiendo que sea posible un gobierno de coalición entre el PP y el PSOE.
El ABC es el periódico que más espacio dedica a la respuesta de Rubalcaba, en un artículo firmado por Mayte Alcaraz, que ayer resbaló con un sorprendente plan de Moncola para atrasar las elecciones hasta febrero de 2016. Y en La Razón, su director, Francisco Marhuenda, lo ridiculiza.
EL PAÍS
El PSOE tuvo que cambiar la estrategia prevista y dedicar todos sus esfuerzos a frenar una ola que crecía, alentada por el expresidente Felipe González, que llegó a decir que «si el país lo necesita, lo deben hacer», al ser preguntado por esa gran coalición.
Alfredo Pérez Rubalcaba tuvo que esforzarse desde primera hora para despejar un asunto que, según admiten dirigentes del PSOE, «crea mucha confusión» entre su electorado porque viene de González, alguien aún con mucho peso entre las bases. «Mientras yo sea secretario general del PSOE no habrá un Gobierno de concentración en España», aseguró tajante Rubalcaba en Onda Cero. También uno de los probables candidatos a las primarias del PSOE, Eduardo Madina, fue rotundo: «No hay ninguna opción de un pacto de Gobierno con el PP. El PSOE nunca formará una gran coalición con el PP».
ABC
El líder del PSOE, que camina sobre el alambre de las malas perspectivas con que arrostra la campaña su candidata Elena Valenciano, y su incierto futuro político, es conocedor de las frecuentes charlas entre el que fue su jefe en el Consejo de Ministros y su rival para alcanzar la Moncloa.
González atizó donde más duele en Ferraz ya que en la sede socialista no quieren ni oír hablar de sumar sus fuerzas a Rajoy para evitar la fagocitación de sus propuestas. Es más, la dirección socialista cree que una apuesta como esa puede perjudicar gravemente a sus intereses electorales y beneficiar a formaciones más radicales, adonde migraría el voto de izquierdas. Sin embargo, en la vieja guardia socialista se opina precisamente lo contrario: un Gobierno de concentración respondería legítimamente al intento de los pequeños grupos, algunos antisistema dentro del sistema, de conformar una gran coalición para acabar con el pacto constitucional que trajo la democracia a España.
EL MUNDO
Según Rubalcaba, ya ha demostrado que no le falta «valor» para hablar con el PP cuando cree que hacen falta pactos de Estado, por ejemplo en política antiterrorista, política europea o contra la consulta soberanista en Cataluña. «Pero una cosa son grandes acuerdos y otra ir a un gobierno de concentración; es que no lo veo», ha insistido.
También ha rechazado que el resultado de las elecciones europeas del próximo 25 pueda condicionar la «hoja de ruta» del PSOE y ha afirmado que se mantendrá el calendario de primarias abiertas, ocurra lo que ocurra. No ha querido desvelar, en este punto, si él tiene intención de presentarse a esas primarias o si se le pasa por la cabeza dejar la primera línea de la política.
LA RAZÓN
También lo rechazó en twitter la número uno a las europeas, Elena Valenciano, y acusó a su contrincante, Arias Cañete, de dejar esta puerta abierta para «hacer daño al PSOE».
LA VANGUARDIA
«Yo creo que la gran coalición en España entre el PP y el PSOE sería imposible, y además sería profeundamente antidemocrático porque dejaría a mucha gente sin opciones.» Así se expresaba Alfredo Pérez Rubalcaba en una conversación informal a finales del año pasado
Nada nuevo bajo el sol.
