El dibujante y viñetista Borja Montoro siempre ha sido claro en su apoyo a quienes tenían el valor de dibujar caricaturas de Mahoma. El 16 de septiembre de 2008 fue, junto con Puebla, uno de los encargados de defender la libertad de expresión de los dibujantes de prensa con ocasión de la presentación de la edición Española del libro de los daneses Ralf Pittelkow y Karen Jespersen Islamistas y buenistas (Gota a Gota).
Cinco años después, hablaba de nuevo, ahora en Periodista Digital sobre la censura sobre el Islam que había en las viñetas de la prensa occidental —[VÍDEO ENTREVISTA] Borja Montoro: «A Rajoy le molesta la prensa, le da rabia, le tiene animadversión»–. Este periódico ha llamado por teléfono a Borja Montoro para recoger sus opiniones sobre la masacre en la redacción de Charle Hedbo. Esto es lo que ha dicho:
El origen no es que publiquen caricaturas de Mohoma. Primero matarán a los que publiquen caricaturas de Mahoma, después matarán a otros. En los países donde tienen mucho más control no se te ocurre dibujar una caricatura de Mahoma porque te decapitan.
Somos lo suficientemente gilipollas en Occidente como para pensar que lo que hay que hacer es no dibujar caricaturas de Mahoma. Más adelante irán puramente contra los que señalen con el dedo y te marquen como ‘perro infiel’, y no hay ninguna explicación más.
Hoy les interesaba poner esa excusa, para que nadie dibuje caricaturas de Mahoma. Porque acojina dibujar una caricatura de Mahoma. Puedes hacer un acto de suicidio libertario, salir a la palestra, ponerte delante de una pantalla y dibujarla; pero sabes que antes o después aparece un tipo y te degüella.
Igual que yo puedo dibujar una caricatura, a un periodista le puede dar por escribir una columna crítica con Mahoma y se la está jugando igual.
El gran error es pensar ya hemos aprendido la lección y que dejando de dibujar caricaturas de Mahoma nos quitamos la amenaza terrorista. Pero sigue ahí. El gran error está en que nos la cogemos con papel de fumar y en la M-30 hay una gran mezquita donde se lanzan proclamas antijudías y contra Occidente.
La Iglesia Católica es la primera que lo está haciendo mal. Los cristianos de Oriente son los primeros que lo están sufriendo, y lo saben. Los que están saliendo de Irak no habían hecho ni caricaturas ni nada. Sencillamente estaban allí y cayeron dentro del círculo de una gente que te degüella con un cuchillo cocinero.