Ha fichado como columnista de ‘ABC‘ y que, para disgusto de los Nacho Escolar, Mónica García Prieto y todos los que se han alegrado públicamente de su despido, seguira contando con columna diaria en un periódico de postín.
Dspedido el lunes de ‘El Mundo’, Sostres cerró este 3 de junio de 2015, menos de 48 horas después, su incorporación al diario de Vocento.
El fichaje se enmarca en el proyecto del consejero deñegado Luis Enríquez y del director Bieito Rubido de darle todavía más aire a su equipo de columnistas.
Y mientras tanto, el siempre polémico Salvador Sostres se despide de ‘El Mundo‘ con elegancia (El abyecto tuit donde Nacho Escolar celebra el despido de Salvador Sostres como columnista de El Mundo).
El columnista no renovará su contrato y abandona el diario de Unidad Editorial tras la llegada de David Jiménez (Columnistas de renombre de El Mundo presionaron a David Jiménez para que echara a Salvador Sostres del diario).
El ya excolumnista de Unedisa asegura en su blog que no se lo esperaba y confiesa sentirse triste.
«Pero entiende que la mayor prerrogativa de un director es elegir a sus columnistas, y David está en su derecho de considerar que lo que yo escribo no encaja con la idea de periódico que quiere transmitir»
«Me habría gustado que me hubiera dado una oportunidad, la oportunidad de entendernos trabajando juntos, pero no ha querido dármela».
«Ni es censura, ni es un ataque a la libertad de expresión».
Sostres no escatima elogios hacía el nuevo director pese a la medida que ha tomado y considera que «El Mundo acierta poniendo a un director joven, integrado a las redes sociales, con experiencia como corresponsal, y capaz de abrir el periódico a nuevas sensibilidades».
«Continúo pensando que haber nombrado a David es audaz, y que dentro de unos años la mayor parte de los directores de periódico de Europa se parecerán más a él que al modelo de lo que hasta ahora ha sido el director clásico».
«Me sabe mal, muy mal, que no me quiera en su proyecto. Uno de mis dos grandes sentimientos es ahora la tristeza por tener que abandonar la que durante cinco años y medio ha sido mi casa».
Sostres aprovecha para agradecer a Pedrojota Ramírez y Casimiro García Abadillo, su apoyo y trabajo y asegura que tiene un sentimiento de «amor a los colores de El Mundo».
«Aunque el nuevo director no me quiera, siempre consideraré que El Mundo es mi casa; no hay reproche ni rabia… ni indemnización: el trabajo que uno hace hay que cobrarlo sólo una vez».
«Me voy triste pero el agradecimiento y el amor son mis dos grandes sentimientos. Sólo puedo desearle a El Mundo la mejor suerte, que estoy seguro de que la tendrá, y con David al frente».
«La vida avanza. Y con ella nuevos retos, nuevas esperanzas, y las inmensas ganas de contarlas» (Sostres cuenta toda la verdad sobre su despido).
