¡Oído cocina! deben pensar en el Palacio de la Moncloa. El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, no se cierra las puertas a ser investido presidente del Gobierno con el apoyo de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias.
Así lo dice este 6 de diciembre de 2015 en una entrevista para La Razón en la que asegura lo siguiente cuando le preguntan si sería presidente con los apoyos de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias:
Según qué condiciones pongan: si me van a hacer desnaturalizar todo el programa reformista de Ciudadanos o pedir que España vuelva a los bandos o cosas que choquen de frente… No voy a ser presidente a cualquier precio. Si soy presidente es porque puedo encabezar un proyecto común y porque los demás partidos asumen buena parte de nuestro ideario. Insisto, es una política ficción difícil de resolver sin tener resultados electorales y sin asumir si están dispuestos a apoyarlo.
Y añade que:
No me parecen una mala fórmula los ejemplos de Sarkozy y Obama, que en sus gobiernos incorporaron a personas próximas o identificadas con otros proyectos políticos. Un proyecto gobernado por Ciudadanos, que pudiera incorporar a independientes de otras sensibilidades en términos políticos, si es para el bien de España, y en términos políticos, no lo descarto.
Sentencia que no tiene por qué gobernar la lista más votada:
No, eso en los años 90 o 2000 era evidente cuando uno sacaba el 40-45% de los votos y el otro, el 20%. Ahí es lógico que intente formar gobierno. Y eso es lo que ha pasado, naturalmente. Pero claro, eso está cambiando cuando estamos en unas encuestas que nos sitúan a 5 o 6 puntos a los diferentes partidos. Si gano yo u otro necesitaremos conquistar y seducir a la mayoría. Y eso requiere diálogo, cintura y creo que, estando en el centro, es más fácil. Dicho esto, creo que lo lógico y razonable es que la lista más votada intente formar gobierno, otra cosa es que no pueda. Si gano intentaré formar gobierno, y si no puedo dejaré pasó al siguiente, es lo más lógico.