Adrián, no te vas a morir. Nos queda la otra enferma, claro. La que no tiene tratamiento. La que no tiene cara ni cura
La sinrazón antitaurina está logrando colarse a golpe de salvajada entre los asuntos más importantes de la prensa nacional–Herrera echa luz sobre los antitaurinos que desearon la muerte a Adrián: «Cuesta pensar que haya seres tan hijos de puta y tan miserables»–.
Resulta tan sádico y tan humillante que determinadas ‘personas’, si es que se las pudiera calificar como tal, hayan irrumpido en las redes sociales para alegrarse de la muerte de un torero o desearle el peor de los finales a un niño de 8 años, que prácticamente no hay periódico que este 11 de octubre de 2016 no recoja el tema.
Desear la muerte a un niño es deleznable, cobarde y puede ser delito. #AdrianTeVasACurar ¡¡Estamos contigo!! Esta batalla la vas a ganar? pic.twitter.com/X84nTcslmO
— Policía Nacional (@policia) 10 de octubre de 2016
Para los diarios ABC y La Razón es directamente tema de portada.
El periódico de Vocento recoge unas declaraciones del padre del niño enfermo al que desearon la muerte por su afición taurina.
El que dirige Paco Marhuenda también lleva a Adrián a su primera plana. Los padres emprenderán acciones legales contra aquellos que escribieron esas barbaridades.
Andrés Amorós escribe en ABC un artículo titulado ‘Una sociedad enferma que coloca a los animales por encima de las personas‘.
Dice el crítico taurino que:
Con los mensajes, colgados en las redes sociales, que se alegraban por la muerte del torero Víctor Barrio creíamos haber tocado fondo, haber llegado a lo que simbólicamente llamamos «el fondo del vaso».
Nos equivocábamos. La capacidad del ser humano para acercarse al ángel o al demonio no tiene límites. Los que le desean la muerte a un niño, gravemente enfermo, solamente porque le gustan los toros, lo acaban de demostrar.
[…]
Tranquilo Adrián. Tú vas a vencer en tu batalla. No escuches la voz oscura de la miseria humana. Me tienes a tu disposición.
Iker J pic.twitter.com/2NDwW6gA1c— ikerjimenez.com (@navedelmisterio) 10 de octubre de 2016
Sigue:
El pasado sábado ha tenido lugar en Valencia un festival taurino, a beneficio de la Fundación de Oncohematología Infantil. Una vez más, el toreo ha mostrado su solidaridad con los que sufren. Lo que nadie podía esperar eran esos mensajes: «¡Que se muera ya! Adrián, vas a morir».
[…]
No es un problema de ser o no aficionados a los toros, sino de pura humanidad. Los que hacen esto se descalifican a sí mismos y a las tesis que puedan mantener: ¡flaco servicio le hacen al ecologismo!
No cabe obviar que esto ha nacido de una radicalización que se está dando en la sociedad occidental y que coloca a los animales al mismo nivel o por encima de los seres humanos.
El «Movimiento para la extinción voluntaria de la especie humana» de Lees Knight, por ejemplo, pide a sus seguidores que no se reproduzcan, para que vaya extinguiéndose la especie, porque «los humanos son un cáncer para el mundo».
Pero el que tiene cáncer es un niño valenciano de ocho años que se llama Adrián. El que no sienta compasión por el dolor de ese chiquillo y de su familia muestra los abismos morales en los que los seres humanos pueden hundirse.
En el otro extremo, Pedro Simón, que se declara abiertamente antitaurino, también muestra su indignación en las páginas de El Mundo. Su columna se titula ‘Adrián, no te vas a morir‘:
A los ocho años es probable que un niño le tenga miedo a la oscuridad, a las puertas semiabiertas de los armarios, a un padre que llega siempre borracho, a un pasillo largo y mal iluminado, a los orcos de Moria y al dentista.
Desde ahora también tiene motivos para tenerle miedo a las redes sociales.
El mensaje lo ha escrito en Facebook una tal Aizpea Etxezarraga (a la que imaginamos sin hijos y verdaderamente enferma).
Está dirigido a un niño que se llama Adrián y que tiene un tipo de cáncer llamado sarcoma de Ewing.
Los pocos toreros que van quedando le hicieron un homenaje en Valencia el otro día y el crío (que a lo peor va por ahí diciendo que le molan las espadas) salió a hombros de la plaza. Valiente asesino.
[…] Creo que podría acreditar que, en muchas ocasiones, lo que hay detrás de un sádico es un gilipuertas con pocos viajes y ninguna lectura.
Sólo quien no ha visto Auschwitz ni ha hablado con los supervivientes banaliza al utilizar el vocablo nazismo.
Y finaliza:
En la planta de Oncología Infantil los he visto salir totalmente sanos después de meses y meses peleando.
Tirar unos dados y comerse 20. Jugar y ganar. Cientos de historias que acabaron bien. Y también los he visto volver morenos, para decirles a los que siguen dentro que hay vida ahí fuera. Por eso te lo digo. El sarcoma de Ewing se cura.
Adrián, no te vas a morir. Qué cojones te vas a morir, si sólo tienes ocho años.
Nos queda la otra enferma, claro. La que no tiene tratamiento. La que nadie quiere sacar a hombros. La que no tiene cara ni cura.
LA PRESIDENTA DE PACMA: «BASTA YA DE MANIPULACIÓN TAURINA»
Silvia Barquero, presidenta del PACMA (Partido Antitaurino contra el Maltrato Animal), no se sumó al #Adriantevasacurar, el movimiento con cuyo hashgtag se pretendía contrarrestar las barbaridades lanzadas por los antitaurinos. Lejos de ello aseguró en su cuenta de Twitter no entender «que un comentario en redes fuera noticia» y clamó por el final de la «manipulación taurina»:
No entiendo que un comentario en redes sea noticia, insultos y amenazas los soportamos muchos a diario. Basta ya de manipulación taurina.
— Silvia Barquero (@barquerosb) 10 de octubre de 2016
A su vez, añadió capturas de ataques que, asegura, también ella ha recibido:
Estas lindezas son de ayer mismo. Y no se hace noticia de ello. Violencia, maltrato y manipulación taurinas. pic.twitter.com/p5VcLxe767
— Silvia Barquero (@barquerosb) 10 de octubre de 2016
