De los dedos rotos «uno a uno», a las dos «pobres» mujeres, -una de ellas una anciana-, expulsadas de un avión con ayuda añadida de la Guardia Civil ¡por hablar en catalán!. Falsas noticias que usan para hacerse las víctimas los pardillos independentistas de turno, algunos de ellos destacados políticos, y para quienes esta última vez la ocasión la pintaban calva, aunque han vuelto a quedar trasquilados. (Los separatistas engañan a una anciana con alzheimer que vota al PP para que bote con ellos).
El trasfondo del suceso radica ni más ni menos en que ambas se enfrentaron de muy malas formas y hechas unas fieras a una amable azafata asturiana que intentaba hacerles comprender que se habían sentado en la fila de asientos que se sitúa junto a la salida de emergencias y que no podían estar allí.
La normativa de la compañía especifica que no podrán sentarse en tal lugar, amén de los pasajeros que necesiten extensión del cinturón de seguridad, mujeres embarazadas, menores de 15 años, pasajeros con niños pequeños o con discapacidades funcionales o –en general- todos aquellos que en caso de accidente no puedan prestar al personal de vuelo la ayuda a la que están obligados según la normativa aeronáutica internacional», según explica la aerolínea en el documento Condiciones generales del contrato de transporte aéreo de pasajeros y equipaje recogido en su web.
Además, la compañía matriz de Vueling, Iberia, es más explícita al señalar que estos pasajeros deben contestar a las instrucciones de seguridad en español o inglés. «Por razones de seguridad, la ocupación de estos asientos está limitada a pasajeros que no tengan dificultades motrices y que puedan entender las instrucciones relativas a la seguridad (tanto escritas como orales, en español o bien en inglés)».
Así las cosas, los pasajeros que se sientan ahí DEBEN poder entender las indicaciones del comandante (en inglés o español, según política de empresa) en caso de situación de urgencia.
— Carlos ن (@Carlos__HU) 13 de noviembre de 2017
EL BULO
La historia se lanzó este lunes 13 de noviembre de 2017 desde las páginas de ‘Diario de Menorca‘, y en la misma se afirmaba que una tal Margarita Camps Coll, residente en Menorca y de 72 años, había sido sacada por la fuerza del vuelo VY3716 de la compañía Vueling que realizaba el trayecto entre Barcelona y Mahón el pasado sábado por la tarde, por hablarle en catalán a una «chula» azafata que la «exigió hablarle en castellano». Una señora de 59 años que salió en defensa de la septuagenaria, también corrió la misma suerte.
El programa de TV3 ‘Els Matins’, cazó la noticia al vuelo y entrevistó a la tal Margarita este mismo martes, metiendo la pata hasta el fondo y quedando una vez más en evidencia. Y es que en las últimas horas decenas de pasajeros que también iban en ese vuelo se han puesto en contacto con varios medios informativos, y han publicado en las redes sociales, para desmentir la versión de la pobre anciana, que ha resultado ser una furibunda independentista de armas tomar y falsa a más no poder.
Los demás pasajeros aplaudieron a rabiar la impecable actuación del comandante del avión y su decisión de ponerlas en tierra.
— resd9 (@resd9) 14 de noviembre de 2017
(17) Hola @tv3, @VilaWeb, @KRLS: que si voleu contrastar (manies que tenen molts periodistes) la noticia falsa que heu difós podeu contactar d’altres passatgers del vol de @vueling en aquest enllaç: https://t.co/3AcUJ301GO
Una altra mania d’alguns periodistes es rectificar pic.twitter.com/1rTgdm3Vzy— resd9 (@resd9) 14 de noviembre de 2017
Algunos de los dirigentes del secesionismo, como la expresidenta del Parlament Nuria de Gispert, pusieron el grito en el cielo y llegaron a exigir el boicot a Vueling.
Boicot a vueling , ja!
— Núria de Gispert. (@nuriadgc) 14 de noviembre de 2017
Incluso Puigdemont se refirió al asunto relacionando el presunto incidente con la aplicación del artículo 155.
«Después de 155 una ola autoritaria crece día a día. Expulsar a alguien de un avión por el idioma que habla es injustificable»,
denunció el expresident en su cuenta de Twitter.
After 155 an authoritarian wave grows by the day. Expelling someone from a plane because of the language they speak is injustifiable https://t.co/nWFbHLg66u
— Carles Puigdemont ? (@KRLS) 13 de noviembre de 2017
Más lejos fue el eurodiputado del PDeCAT, Ramón Tremosa, que anunció que había llevado el asunto al Parlamento Europeo.
Avui he presentat denúncia contra @vueling, via pregunta parlamentària escrita a la Comissió Europea, per l’expulsió de dues dones que parlaven català d’un avió pic.twitter.com/W1NxTRqx9Y
— Ramon Tremosa ?? (@ramontremosa) 14 de noviembre de 2017
La compañía ha preferido ser cauta de momento.
«Lamentamos los inconvenientes a nuestros pasajeros. Todas las tripulaciones de avión con base en Barcelona hablan catalán. Estamos investigando que ha sucedido parta poder responder a través de los canales oficiales»,
informa Vueling en sus redes sociales.
Lamentem els inconvenients als nostres passatgers. Totes les tripulacions d’avions basades a Barcelona parlen català. Estem mirant què va passar i poder respondre a través dels canals oficials.
— Vueling Airlines (@vueling) 13 de noviembre de 2017
El orgasmo de una independentista catalana al descolgar un policía local la bandera española