Es un hecho que entre el gremio periodístico español lo de ‘perro no come carne de perro’ nunca ha existido. Ni cuando se trata de todo un veterano como Manuel Cerdán. Contra el célebre investigador -que destapó relevantes casos en sus etapa en ‘Interviú’ o en ‘El Mundo’- han caído fuertes ataques desde que sacó el vídeo de Cristina Cifuentes robando en un Eroski.
Ataques que principalmente han venido por parte de los practicantes de la ciencia de la ‘cloacología’, una nueva raza periodística que se va a extendiendo a la diestra y la siniestra viendo cloacas por todas partes.
El problema para los cloacólogos -en coincidencia con los argumentos de Podemos- es que Cerdán no ha querido permanecer callado ante los ataques y el pasado fin de semana lanzaba una advertencia en forma de extensa tribuna en OkDiario recordando que si cuestionaban sus investigaciones señalándole como vinculado a algún tipo de red de intereses, él también podía señalar a los que le acusaban.–Horror en el hipermercado, terror en el periodismo—
La actitud podría recordar a la aquel directivo del Grupo PRISA, Vicente Jiménez, que en 2009 ante los ataques a ‘El País’ soltó en TVE que se debía a «periodistas a sueldo del Gobierno de Madrid». Entonces Jiménez optó por la comodidad de lanzar la piedra y esconder la mano sin dar ningún nombre en una actitud que le recriminó en director Esther Palomera.–¿Quiénes son los «periodistas a sueldo» a los que alude el director adjunto de El País?—
Manuel Cerdán no es Vicente Jiménez y aunque tampoco ha querido dar muchos nombres, si ha dejado una línea de puntos que permite sospechar a quienes se está refiriendo al hacer el censo de cloacólogos
…»Un editor al que tuve que salvarle el pellejo»…
Cerdán se refiere expresamente a un artículo de Rubén Arranz para reprocharle que dé lecciones de cómo hacer periodismo y le acusa de megalomanía, pero eleva el tiro a alguien más:
«Tiene su gracia que esa información se publique en un diario a cuyo editor tuve que salvarle el pellejo en una querella del CESID».
Se refiere a Jesús Cacho, que en un reciente y comentado artículo calificaba a OkDiario de ‘extrema derecha’ (VozPopuli, 29.04.2018) y que, efectivamente fue objeto de una querella (recogida en ‘El País’ el 10.03.1995) por vincular a directivos del CESID con una conspiración para culpar a Suárez de los GAL (portada de ‘El Mundo’ del 20.02.1995). Si de lo dicho por Cerdán se dedujera que él intervino en aquel pleito como testigo para salvar a Cacho, se podría concluir que la gratitud no andaría entra las virtudes del citado editor.
… «Otro puso en riesgo a agentes del CNI»…
Cerdán también se defiende de un periodista al que no cita pero del que dice que «reprodujo la grabación de policías con agentes secretos del CNI poniendo en riesgo». Quien mejor podría encajar en esa descripción es Jesús Maraña, el propietario del digital InfoLibre, donde se ha calificado la investigación de Cerdán como trabajo para la mafia con artículos como ‘Cremita para la Mafia’ (InfoLibre, 25.04.2018) o ‘Los Señores de las Cloacas’ (InfoLibre, 29.04.2018).
Dándose la coincidencia de que en su día InfoLibre reprodujo unas grabaciones de agentes del CNI hablando entre ellos del caso Nicolás (InfoLibre, 20.12.2014) en la que ni se molestaron en distorsionar las voces facilitando su identificación y el riesgo que eso les suponía. ¿Cómo consiguió InfoLibre aquella filtración? ¿No fue acaso un producto ‘cloaquero’? ¿O sólo es cloaquero si lo hace un medio de derechas?
…»Otro difundió conversaciones grabadas ilegalmente»…
También cita a otro periodista de los que le ha atacado como alguien que «difundió la conversación del ministro del Interior con el jefe Antifraude de Cataluña mientras reconocía ante el Parlamento catalán que la grabación era ilegal». El destinatario del dardo bien podría ser Carlos Enrique Bayo, que un artículo en Público.es publicado el 26.04.2018 decía que la actitud de OkDiario era una maniobra de ‘la cloaca’ para evitar la moción de censura porque en ella se hablaría de corrupción (¿Y en una investidura no?).
Carlos Enrique Bayo con una larga trayectoria periodística (que incluye una polémica etapa en ‘Diario16′ como defensor de los Guardias Civiles acusados por el caso Lasa Zabala) fue, más recientemente el encargado de publicar la filtración de la grabación personal entre Fernández Díaz y De Alfonso en plena campaña electoral y que tanto intento rentabilizar el independentismo (Público.es, 21.06.2016). ¿No fue aquello una filtración de ‘la cloaca’? ¿O como con InfoLibre, para Público.es sólo es ‘cloaca’ si se filtra a un medio de derechas y es periodismo serio si se filtra a un medio de izquierdas?
…»Otro está preocupado porque su mujer trabajaba para Cifuentes…
Más enigmática es la acusación a otro de los que le atacan que, según Cerdán, está «preocupado porque su mujer trabaja para Cifuentes», en otro momento del texto se refiere a este periodista por ser ‘el colmo del cinismo’ por situarle en «el submundo de la comunicación» teniendo a su esposa de «directora general».
Aparentemente sería una referencia a Javier Casqueiro, periodista del diario ‘El País’, que publicaba un reportaje el pasado 29.04.2018 en el que decía que la difusión de Cerdán respondía a «Una maraña de vendettas e intereses cruzados en el submundo de la comunicación».
Si fuera cierto que la esposa de Casqueiro trabaja para la administración de Madrid eso no le colocaría en la mejor situación para hablar de ‘intereses cruzados’ en lo relativo al ‘caso Cifuentes’.
…»Otro se enfrascó 5 años con el 11-M»…
Cerdán incluye en su censo a otro periodista «que se dedicó un lustro» a enfracarse en «teoría de la conspiración del 11-M.» En esta acusación encajan tanto Pedro J. Ramírez de ‘El Español’ como Casimiro García Abadillo de ‘El Independiente’, pues ambos medios han protestado por la publicación del vídeo destruye-Cifuentes. Dado que habla en pasado y Pedrojota sigue enfrascado en el presente con lo del 11-M, el aludido por Cerdán probablemente sea Abadillo, que el pasado 28.04.2018 publicaba un texto «El Independiente» insinuando que detrás de la información de Cerdán había actitudes mafiosas.
… «Otro fue jefe de prensa y portavoz de Rafael Vera durante el contubernio de la guerra sucia…»
Cerdán se podría referir al periodista Agustín Valladolid, que el pasado 28.04.2018 tuiteaba el texto «Con la dimisión de Cifuentes ha vuelto a quedar claro que la cloaca funciona». Si así fuera, sería llamativo que hablara de cloacas quien fue director general de la Oficina de Relaciones Informativas del Ministerio del Interior precisamente en la etapa de Rafael Vera y José Luis Corcuera, cuando se produjeron en las cloacas de Interior escándalos como el de los GAL, Paesa o Roldán.
«Llevó a su programa a un abogado para acusar de pederasta a un fiscal honrado…»
Cerdán también incluye en su censo a un periodista que «llevó a su programa a un abogado para acusar de pederasta sin pruebas a un honrado fiscal anticorrupción».
Se da la circunstancia de que en el programa ‘El Cascabel’ que presenta Antonio Jiménez en Trece (el mismo Antonio Jiménez que calificó la difusión del vídeo del robo de Cifuentes como algo de una ‘ética, moral y estética bastante fea’), que en su programa del 18-05-2017 fue invitado un abogado, Ignacio Pelaez, para que acusara de pederasta a uno de los fiscales anticorrupción de España, que denunció que eso formaba parte de la campaña de amenazas de la que ha sido objeto por parte de la mafia rusa a la que investiga. Y la primera persona que aireó la supuesta pederastia del fiscal fue – como reconoció el abogado en Trece – el comisario José Villarejo.
Alguien podría pensar que, si aquella acusación no fuera verdad, airear aquella historia villajera como hizo Pelaez también era algo de ética, moral y estética bastante fea.
«…Uno financiaba sus investigaciones con una agencia de detectives y otro pedía favores porque quería colocar a su jefe…»
La relación de «cloacólogos» que le han atacado Cerdán también incluye a otros dos a los que identifica como un periodista que «financiaba sus reportajes con fondos de una agencia de detectives» y otro que «pedía favores porque quería colocar a su jefe en la Presidencia del Colegio de Abogados».
El periodista vinculado a una agencia de detectives al que se refiere Cerdán es Javier Chicote, de ‘ABC’, que nunca ha ocultado su amistad con el responsable de la agencia ‘Método 3′, Francisco Marco (Onda Cero, 20.02.2013) y hasta presentó el libro de este (ABC, 13.06.2015).
Chicote calificó en Trece la difusión del vídeo de Cifuentes como algo «que viene de la mafia, de alguien mafioso» (El Cascabel, 25.04.2018).
Cabe aclarar que los reportajes de Chicote –como el que hizo en República Dominicana– los pagaba Marco a la revista Interviú (no al periodista), revista que en aquel momento dirigía precisamente Manuel Cerdán.
En cuanto a periodistas «vinculados a Colegios de Abogados» quien mejor podría encajar en esa descripción es Alfonso Merlos que, según ‘El Confidencial Digital’ del 23.10.2017 trabajaba para José María Alonso, del Colegio de Abogados. Merlos intervino en Trece el 26.05.2018 en ‘El Cascabel’ para denunciar que Cifuentes había sido víctima de una extorsión.
«…Periodista incondicional de Villarejo…»
Por último Cerdán habla de un periodista ‘incondicional de Villarejo mientras le suministraba exclusivas’. Y aquí realmente lo pone difícil, porque el listado de periodistas destinatarios de las filtraciones del hoy encarcelado policía son considerables.
Patricia López, del diario Público.es, no se ha cansado de repetir que Villarejo era una de las fuentes de Eduardo Inda, lo que ya es vox populi en toda la profesión. Pero no es menos vox populi que también suministró datos a figuras como Esteban Urreiztieta, Antonio Rubio (que el pasado 1.05.2018 retuiteaba un texto que vinculaba la caída de Cifuentes a ‘las Cloacas’) o al ya citado Carlos Enrique Bayo y su compañera Patricia López. En la etapa en la que Casimiro García Abadillo era director de ‘El Mundo’ se publicaron varias exclusivas ‘made in Villarejo’ como desveló el propio columnista de ese periódico Federico Jiménez Losantos (EsRadio, 11.03.2015).
Pero quien mejor encaja en el texto de Cerdán es Patricia López, que calificó en TV3 la difusión del vídeo de Cifuentes que achacaba a Villarejo como algo ‘vomitivo’. Lo que no aclaraba López es si le parece ‘vomitivo’ recibir información de Villarejo… ¿por qué ella se reunió con él en varias ocasiones? ¿No fue acaso para que también le pasara información a ella?
Cada periodista de investigación tiene derecho a recurrir a las fuentes que considere oportuno. Lo que no dejaría de resultar chocante, es que periodistas aceptaran ‘fuentes polémicas’ cuando dan información a su medio para deplorarlas cuando dan información a medios de la competencia. Eso no parece algo tan épico como una lucha contra las cloacas, sino algo tan viejo como la guerra de competencias mediáticas por la defensa del negocio de cada uno.