Alfonso Ussía, siempre atento a la actualidad y sobre todo con este Gobierno de coalición que no deja de dar noticias, se cachondea a mandíbula batiente de la última iniciativa, la de considerar delito cualquier exaltación del franquismo dentro de la reforma prevista del Código Penal.
El escritor y columnista de La Razón subió una serie de mensajes en Twitter en los que se pitorreaba de las intenciones del Ejecutivo de Pedro Sánchez:
Franco creó la seguridad Social. Lo escribo hoy porque mañana puede ser un delito.
— Alfonso Ussía (@alfonso_ussia) February 11, 2020
Carrillo fue un asesino de 6.000 inocentes. Lo escribo hoy porque mañana puede ser un delito.
— Alfonso Ussía (@alfonso_ussia) February 11, 2020
El abuelo de Pablo Iglesias fue un enchufado del ministro falangista Girón. Lo escribo hoy porque mañana puede ser un delito.
— Alfonso Ussía (@alfonso_ussia) February 11, 2020
EL FRANQUISTA RECONVERTIDO
Al mismo tiempo, Alfonso Ussía aprovechaba para meterle un palo monumental a Fernando Ónega, otrora propagandista del régimen y ahora un auténtico fan enfervorecido, como sus hijas, de acabar con todo atisbo del franquismo, empezando por aplaudir la exhumación de Franco y preguntarse a la vez que por qué no se había hecho antes.
Fernando Onega, hoy tan socialista, fue jefe de prensa de la Guardia de Franco. Y redactor de Arriba. Lo escribo hoy porque mañana puede ser un delito.
— Alfonso Ussía (@alfonso_ussia) February 11, 2020
De hecho, un tuitero aporta una foto para que se viese de dónde venía Ónega y como no tenía, precisamente, una excesiva cara de sufrimiento:
Maldita hemeroteca!!
Aquí vemos a Onega en plena exaltación. pic.twitter.com/aZH56QKDMm— Juan de Laciana (@JuanLaciana) February 11, 2020
DE LOS ARTÍCULOS ELOGIOSOS DEL ARRIBA A DAR PALMADAS A LAS FAROLAS
Lo que es evidente y a nadie se le oculta es que Fernando Ónega, en su juventud, estuvo fuertemente vinculada a la Falange de Franco (la del poder, no la heterodoxa) y rindió visita al Caudillo, vestido de camisa azul, en una foto histórica recogida en el libro ‘Falangistas’ de Gustavo Morales que el siempre ha intentado olvidar.
En un artículo del ‘Arriba’ al dia siguiente de la muerte de su adorado Caudillo, escribía este lacrimógeno y edulcorado texto:
En el Arco de Triunfo de la Moncloa, donde la ciencia le rinde homenaje a las Fuerzas allí vencedoras, Madrid despidió a Franco. Despidió su cuerpo, porque su sentido de la vida, de la política y, sobre todo, de la eficacia, que ahora pasaban al reino de la Historia, quedaría grabado para siempre en aquellas gentes que con tanta devoción, cariño y agradecimiento ahora le despedían…
Antes, en su aprendizaje del franquismo, había pasado por la jefatura de prensa del Movimiento en La Coruña, jefe Nacional de Prensa de la Guardia de Franco y asesor político de esta institución franquista. Después vinieron los lametazos al Rey y el ‘puedo prometer y prometo de Adolfo Suárez. Ahora se ha convertido en un sanchista convencido que se quejaba amargamente de por qué el Caudillo no había sido exhumado mucho antes. ¡Vivir para ver…y para escuchar!