Choque de trenes entre Antonio Caño, el ex director de El País fulminado por PRISA y según sus propias palabras, «por razones ideológicas«, y Marta Flich en ‘Todo es mentira’.
El programa de Cuatro esperaba al periodista jinense con la guadaña y se dedicaron, fiel a su estilo marrullero, a sacarle todos los trapos sucios. El espacio de Risto Mejide no quiso dejar pasar la oportunidad y se esforzaron en destruir la imagen de Caño de mártir de la causa ideológica, tras haber asegurado en otros espacios que su enfrentamiento con Pedro Sánchez fue el principio del fin de su etapa en el grupo.
Fue una entrevista que por lo demás, más allá del amarillismo y del tono soez y barriobajero, no aportó gran cosa a la situación de los medios, los periodistas y la libertad de expresión en España. Alguien debería aconsejarle al ex director de El País que eligiese mejor sus apariciones tras su fulminante despido de PRISA.
Un sueldo de 375.000 euros
Flich tenía un as en la manga y con él se dedico a dar jaque a su oponente.
La presentadora recordó la situación de los empleados del grupo en una etapa de recesión y pandemia y aportó el dato de lo que cobraba Caño, unos emolumentos cuanto menos desmesurados. «¿Usted no cree que esa remodelación para hacer más rentable la empresa no tiene que ver con esos 375000 euros que usted cobraba, 30000 euros por columna?».
El periodista se defendió: «El despido de una sola persona no son solución para los problemas económicos del grupo que son de otro tipo y variados».
«Los problemas del grupo están en vías de solución gracias al éxito de la política de suscripciones y yo estaba ahí para contribuir a esa solución, yo no cobro eso que usted dice, yo no cobro por columna, sino por plena dedicación al periódico. Esa cifra la cobraba como director y después se cobró en la época de postdirección como ha pasado con el resto de directores del periódico».
Flich había olido la sangre y no estaba dispuesta a aflojar: «Vayamos al asunto del despido ideológico: usted escribió en una editorial que Sánchez era un «insensato sin escrúpulos» pero costaba más criticar a Mariano Rajoy. Se despidió a Miguel Ángel Aguilar por criticar la censura y también John Carlin, por criticar a Rajoy».
«No se les despidió por eso. Aguilar montó un periódico nuevo mientras era columnista de El País, lo que planteaba incompatibilidad. Yo traje a Carlin a España y lo contrate para el periódico. Entró en una vía de apoyo expreso y manifiesto al independentismo y que era incompatible con la línea del diario en un momento muy delicado».
Flich: «Usted defendía al Gobierno de Rajoy»
El último encontronazo de la dantesca entrevista llegó cuando la presentadora le acusó de «defender al Gobierno de Mariano Rajoy» durante su etapa al frente de El País, algo que indignó a Caño: «Eso es completamente falso».
Escribimos más editoriales contra Rajoy que contra Sánchez durante mi etapa como director
En ese punto, poco más se podía sacar en claro de esta ‘entrevista’. Desgraciadamente, Caño eligió un programa como ‘TEM’ para denunciar su situación, algo que ha quedado comprobado que no ha sido una buena idea.
