En 2007 hubo 52 quejas; en 2008, 84, y en 2009 ya van 82 y todavía faltan las campañas de Navidad
Empresas que hasta ahora centraban sus batallas en las baldas de los supermercados y a través de anuncios de televisión están ahora iniciando una nueva estrategia: demandar a los competidores para que demuestren sus afirmaciones ante los tribunales.
En 2007 hubo 52 quejas; en 2008, 84, y en 2009 ya van 82 y todavía faltan las campañas de Navidad.
Un juez acaba de obligar a DirecTV a modificar un anuncio tras una demanda de Charter Communications.
AT&T ha demandado a Verizon Wireless sobre un anuncio, diciendo que es falso que AT&T tuviera cobertura en la zona que promocionaban.
Archienemigos como Pantene y Dove, Science Diet y Iams, AT&T y Verizon Wireless, Campbell Soup y Progresso han tenido sus más y sus menos en los últimos meses por la publicidad que utilizan.
El objetivo no es resarcimiento económico, sino cuota de mercado.
Los consumidores, en cambio, asisten al espectáculo algo atónicos, porque algunas reclamaciones rozan lo abursdo.
Pantene critica que Dove diga que su «acondicionador repara mejor el cabello».
Iams ha sido acusado por la afirmación: «No hay perro que le guste más otra comida que de la Iams.»
Lo cuenta todo en detalle The New York Times en un artículo titulado Best Soup Ever? Suits Over Ads Demand Proof.