Sobre Jiménez Losantos, Villa ha comentado que ha trabajado muchos años con él y sólo puede decir "cosas buenas"
Se refiere, claro, a cómo han cambiado las tornas en la radio de los obispos desde la salida de Federico Jiménez Losantos.
Ahora, el director de ‘La Mañana’ se enorgullece de que La COPE sea una radio «normal» con una nueva fórmula, eso sí: ministros, aunque sean socialistas, y obispos.
Villa ha hecho balance de los primeros meses sin que la cadena cuente con Federico Jiménez Losantos y ha asegurado que «ha costado mucho, pero la COPE ha recuperado la normalidad».
Para Villa, la marcha de Losantos ha supuesto homologarse con el resto de cadenas.
«Hemos tenido que hacer ver que somos normales, que no somos gente rara con un jardín diferente, donde se saca el trabuco a todo el que llega y se dispara indiscriminadamente”
En una conferencia en el Foro de la Nueva Comunicación, Villa dice que está orgulloso de que durante estos dos meses y medio se hayan dedicado espacios a entrevistas con ministros socialistas, algo que ha contribuido a que no se vea a la COPE como un medio «diferente».
También han vuelto a la cadena el líder del PP, Mariano Rajoy, y el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón.
EL PROGRAMA Y LA AUDIENCIA
Villa cree que la actual época de La Mañana necesita «tiempo y paciencia» para asentar esa nueva apuesta de la COPE y no le preocupa su cita con el primer examen del estudio general de medios (EGM) del próximo 10 de diciembre.
«No temo ningún batacazo, estoy convencido de que va a ir bien»
«Sólo nos interesa el futuro, y no el pasado»
LAS COSAS BUENAS DE LOSANTOS
Sobre Jiménez Losantos, Villa ha comentado que ha trabajado muchos años con él y sólo puede decir «cosas buenas».
«Losantos ha creado un género único e irrepetible y ha conseguido una influencia muy importante»
Al ser preguntado por la cadena de Losantos, esRadio, Villa coincidió con el presidente de Onda Cero, Javier González Ferrari, con que era necesario actuar contra las radios piratas.
«Es muy triste que los poderes no actúen con la eficacia y rapidez necesarias para que las radios piratas no funcionen, porque se pone en juego la viabilidad de grandes empresas de comunicación que son legales, y la supervivencia de muchos puestos de trabajo legales»
