A mí no me genera ninguna angustia el EGM
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Falta apenas un minuto para las ocho. Carlos Alsina llega al estudio portando en una mano cinco folios en los que está resumido y analizado lo que ha dado de sí el día. El argumento para cuatro horas de radio en la otra . «Les voy a decir una cosa. Tic, tac, tic, tac… Cuenta atrás para la caída de Hosni Mubarak.» Así empieza la edición del primer día de febrero de 2011 del informativo más prestigioso de la cadena de Planeta. Después de seis temporadas, La Brújula se ha contagiado del estilo propio que el locutor lleva defendiendo 20 años.
Para la realización de este reportaje, Periodista Digital llega a la conclusión de que ese «estilo Alsina» de contar noticias supone que un programa de radio puede, en la misma tarde, poner al oyente al día de la actualidad, cantarle a Rubén Darío a partir de los los titulares de la prensa económica, extraer lecciones de Economía del comportamiento del mafioso Tony Soprano, hacer un parte meteorológico diferente o defender a los patinazos de Bisbal en Twitter con un Soneto.
La política centra gran parte del argumento principal de La Brújula. Carlos Alsina reconoce que ese tema le parece que tiene mucho de puesta en escena, de teatro… Aunque no está muy convencido de que la mayoría de los días hablen de la Política (con mayúsculas).
«La mayoría de los días hablamos de los políticos y la gracia está en encontrarles el truco. Y no es excesivamente complicado porque son muy obvios en sus estrategias y tácticas».
Mubarak y la vista de Merkel a España eran su encrucijada particular de aquel martes 1 de febrero de 2011 y a pesar de lo complicado de la navegación en directo a través de un espacio de tan amplio horario, Alsina cuenta que cada tarde desea que «algo» le haga perder el rumbo.
«Siempre que luego sepas volver es muy entretenido desviarse del camino en algunos momentos. Los programas de actualidad siempre tienen un argumento principal y luego, como en las series de televisión, están las tramas secundarias. Me gustan sobre todo cuando es un oyente el que te facilita la trama secundaria de ese día.»