Los oyentes tienen la idea de que yo libro constantemente. Cuando hay Radioestadio trabajamos incluso más pero luce menos...
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Las llamadas de los oyentes en directo, «noticias que no interesan a nadie» y la búsqueda de fórmulas para conseguir (por demanda de la audiencia) que haya programa los días que se emite Radioestadio entre semana son las novedades que centran la atención de Carlos Alsina en el arranca de esta sexta temporada al frente de La Brújula.
En tono reivindicativo, pero no sin cierta dosis de ironía, el director de La Brújula pide que el Estudio General de Medios les cuenta mejor a pesar de que
«A mí el EGM no me quita el sueño porque no se lo quita a los directivos de la cadena».
Y, además, teoriza con la posibilidad de emitir La Brújula a través de Internet cuando, debido a la actualidad deportiva entre semana, se emita Radioestadio en el horario de este programa informativo.
«Los oyentes tienen la idea de que yo libro constantemente. Piensan que hay semanas que el programa se emite el lunes y puede que el viernes. Cuando hay Radioestadio trabajamos incluso más pero luce menos…»
De las primeras temporadas de La Brújula recuperan el minuto que dedican a lo que consideran «noticias que no interesan a nadie». Carlos Alsina explica en esta entrevista para Periodista Digital que
«Lo que contamos en esa sección son cosas muy serias que pasan, habitualmente, en lugares muy lejanos y casi siempre muy desgraciadas. (…) Y despierta una reacción de protesta entre los oyentes que dicen que a ellos sí les interesan esas noticias… Es justo lo que buscamos.»
Las llamadas en directo es una práctica que se aleja del estilo que Alsina ha impreso en La Brújula desde que se puso al frente del programa hace seis años. Pero cuenta que no fue la presión de sus jefes la que llevó a «abrir los teléfonos» sino la presión de sus propios oyentes.