Contra todo pronóstico, el pasado 27 de febrero de 2020, el cantante Plácido Domingo cancelaba su actuación en La Traviata que iba a interpretar entre el 9 y el 23 de mayo en el Teatro Real.
El tenor asumía de esta forma «toda la responsabilidad» de las acusaciones y pedía perdón.
Este 2 de febrero de 2020, Federico Jiménez Losantos comentaba en la crónica rosa de Es la mañana de Federico el perdón público del artista y culpaba a la Cienciología de ello.
La mesa de debate se basaba en la columna de Voz Populi de Guadalupe Sánchez Baena en la que la autora habla de una «investigación independiente» del AGMA, el sindicato de artistas musicales de Estados Unidos.
AGMA es una filial del Sindicato de Actores de Cine y la Federación Americana de Artistas de Radio y Televisión estadounidenses (SAG-AFTRA). «En 2017, jóvenes actores denunciaron que la secta invertía millones en SAG AFTRA en forma de publicidad y que muchos eran captados por la cienciología a través de los anuncio», afirma Guadalupe Sánchez.
Esta organización mantiene un «público y notorio enfrentamiento» con Plácido Domingo. La autora recuerda que «en 1992 la nuera de Plácido comenzó a trabajar en el centro de celebridades de la cienciología que hasta hace apenas tres años se anunciaba en las publicaciones del sindicato. Allí conoció a los dos hijos de Plácido, miembros de la secta, y se casó con uno de ellos».
Tal y como escribe Sánchez Baena:
«Plácido siempre intentó liberar a sus hijos de las garras de la secta, y lo consiguió con uno de ellos. El otro, según la familia, sigue siendo miembro porque la Iglesia de la Cienciología está estrechamente ligada al mundo del famoseo estadounidense, muchos de cuyos miembros también lo son del sindicato. La secta decidió tomar represalias contra Plácido machacándolo en lo privado para arruinarlo en lo público. Y parece que encontró en las ansias revanchistas del movimiento Me Too el instrumento perfecto. Y, al margen de otras consideraciones, les ha funcionado».
En base a esta teoría, Federico Jiménez Losantos ha comentado que Plácido le parece «un baboso» pero «eso no es delito». El comunicador aprovechó para recordar la teoría de la autora Sánchez Baena: «¿Quiénes son estos de la Cienciología que le sacan la pasta y vuelven tarumba para perseguir como un juez paralelo?». La consecuencia, tal y como explica Losantos es que «ha triunfado la venganza de la Cienciología«.