El periodista Carlos Alsina reflexiona sobre la derogación del delito de sedición en la sesión de ayer en el Congreso.
El presentador de Más de Uno en Onda Cero, destaca en su monólogo de este viernes, que “la incineración del Código Penal” ha salido gracias a los 120 diputados del PSOE que se rindieron a los enemigos de España para que el presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, permanezca en el poder.
Atiza al grupo parlamentario socialista que “igual que defendía que la sentencia del Supremo debía cumplirse íntegramente cuando Sánchez dijo que así debía ser, defiende ahora que la sedición está anticuada porque Sánchez ha dicho que lo está”.
El locutor también considera que esta manera de proceder de los diputados y senadores “les quita mucho trabajo, esa es la verdad. Porque tener criterio propio sobre las cosas es una de las labores más trabajosas que se conoce”.
Sin embargo, lo mejor estaría por venir.
Además de mofarse por el hecho de que Sánchez será el nuevo líder de la Internacional Socialista, porque es una institución que no le ha interesado a nadie en España durante años pero que ahora, gracias a la propaganda gubernamental, pasará a ser una «institución crucial para el orden mundial».
También ha retratado al Presidente por sus palabras cuando se define como una persona que «ama el cambio y que trabaja por los cambios». Estima que si en algo ha cambiado es en su criterio y, sobre todo, en con quién está dispuesto a negociar y pactar.
«Nada ha cambiado más en estos cuatro años de gobierno de Sánchez que el propio Sánchez. Bueno, que las posiciones políticas del propio Sánchez. Un cambio de postura tras otro, desde el bandazo fundacional, pasó de repudiar a Podemos y a Esquerra a acoger a Podemos en su Gobierno y bendecir a Esquerra como socio preferente; hasta estos últimos cambios de posición como la sedición. Al final todo esto ha terminado por acreditar que lo único que en Pedro Sánchez no cambia es su predisposición a cambiar, siempre que sea necesario, con tal de permanecer. El camaleón abrazado a un junco. Ya puede soplar un vendaval que, cuando el vendaval escampe, ahí seguirá, en el junco, adaptado a las circunstancias».
Tampoco se le escapó las palabras del líder de Bildu, Arnaldo Otegi, que asegura que sin ellos no habría gobierno. Destaca que no existe ninguna paradoja porque su presencia en el Ejecutivo «es un camino de ida y vuelta».
«El independentismo lo último que le interesa es que vuelva a haber un gobierno de derecha. Los que quieren irse de España, como no pueden irse, prefieren un presidente que les atienda y les de oxígeno. ¿Dónde está la paradoja?».
Otegi se cachondea de Sánchez
La mal llamada Ley de Memoria Democrática, sacar la Guardia Civil de Navarra, acercar masivamente a los presos de ETA, entregar las competencias penitenciarias, y ahora la Ley de sedición son algunos de los ejemplos más aberrantes del arrodillamiento de Pedro Sánchez a los enemigos del Estado español para ‘atornillarse’ en el sillón presidencial.
Las palabras de Otegi no dejan lugar a dudas que con este Gobierno Frankenstein los que quieren romper a España están más cerca de lograr sus objetivos:
«No hay Gobierno de progreso en el Estado español si los que nos queremos marchar del Estado español, y además, somos de izquierda no sostenemos esa oportunidad. Esa es la gran paradoja: sin vascos independentistas y catalanes independentistas de izquierda, no hay Gobierno PSOE-Podemos en el Estado. Y eso es lo que nos ofrece la posibilidad de negociar cosas»
Si hay algo paradójico es que el Gobierno apruebe las modificaciones legislativas con quienes han cometido los crímenes, faltando a su palabra y a su deber de proteger la integridad del Estado.
Desgraciadamente para España, está es la cruda realidad.
Sánchez TRIDOR.pic.twitter.com/qX3B1veqE5
— Pedro Pineda Celis (@pedropcelis) November 24, 2022
