Tienen una característica bastante especial las ministras de Podemos. Y no es que sean mujeres ni jóvenes; es que son ridículas.
Es un rasgo bastante identificativo en casi todo lo que hacen y lo demuestran en cuanto pueden. Son ridículas en la forma de comportarse y son chapuceras al hacer sus leyes, y a los hechos nos remitimos. Y el caso de Ione Belarra este 28 de diciembre de 2022 no es una inocentada sino una muestra más.
Pasaba como entrevistada la ministra de Asuntos Sociales por el Hoy por Hoy de la Cadena SER y allí se encontraba, claro está, con Àngels Barceló. Tampoco es precisamente la periodista que más vaya a molestar a nadie del Gobierno (recuerden que es la entrevistadora de cabecera de Pedro Sánchez), y además es mujer de las que hace gala de feminismo, de modo que la pataleta ochoemera de Belarra no tuvo ningún sentido.
Lo que obviamente pasa es que a la ministra y secretaria general de Podemos le debe molestar mucho la verdad, que no es otra que aunque ella ostente el cargo, es Pablo Iglesias quien sigue siendo el líder en la sombra y el que mueve los hilos. Si ella quiere pensar que el que pregunta es por una cosa de machismo, que se lo haga mirar.
Barceló: «¿Consultará con Pablo Iglesias la decisión que adopte Podemos a la hora de sumarse a la candidatura de Yolanda Díaz?»
Belarra: «Fíjate que esa pregunta nunca me la harían si yo fuera un secretario general. Y lo pienso de verdad».
Barceló: «Pero yo no se lo estoy preguntando porque él sea un hombre».
Belarra: «Yo creo que hay una parte…»
Barceló: «Ministra, no me conoce usted a mí eh. Me da igual que sea un hombre o una mujer. Él tiene una presencia pública que no tienen otros representantes públicos y él por ejemplo en estos micrófonos expresa muchas veces la opinión de Podemos».
Terrible. Belarra terminó disculpándose con Barceló pero la idea la volvió a transmitir exactamente igual. Cada vez que alguien les pregunta por algo que no les gusta salen con lo mismo: machismo.
Belarra: «Sí, sí…, pero tengo la sensación de que eso si yo fuera un hombre no estaría tan presente como lo está».