Otra periodista y cuatro soldados canadienses han muerto en Kandahar por la explosición de una bomba
Un periodista y un cámara de una televisión pública francesa «France 3» han sido secuestrados en Afganistán junto con su intérprete, el chófer del vehículo y un familiar de éstos.
La desaparición de los periodistas coincide con el viaje a Afganistán del ministro francés de Exteriores, Hervé Morin, que pasará la Nochevieja junto al contingente galo en la base de Nijrab, al noroeste del país.
El secuestro se produjo a unos sesenta km de Kabul, en la provincia montañosa de Kapisa en donde están desplegados unos 700 soldados de los 2.800 que tiene Francia en Afganistán integrados a la fuerza de la OTAN.
«Los dos periodistas, acompañados por su traductor afgano, el hermano y el primo del traductor, fueron secuestrados en una ruta entre Surobi y Tagab».
Los cinco hombres fueron secuestrados por «talibanes que los emboscaron» en el pueblo de Omarjeyl, a mitad de camino entre Tagab y Surobi.
«No tenemos noticias de ellos desde hace 48 horas», declaró Paul Nahon director de reportajes del grupo de televisión agregando que el periodista y su camarógrafo viajaron a Afganistán por unos quince días para realizar un reportaje.
EL MINISTRO DE VISITA
De visita a las bases francesas en Afganistán para el año nuevo, el ministro de Defensa francés indicó que estaban «sin noticias de los dos periodistas franceses» desaparecidos desde el miércoles y afirmó que no recibió «ninguna reivindicación de grupo alguno».
«No se debe descartar por lo tanto ninguna hipótesis y hacemos lo posible para contactarlos».
El equipo de periodistas llegó el miércoles por la mañana al pueblo de Surobi para reunirse con un contacto que les habría permitido ir luego hacia Tagab, en la provincia de Kapisa, al noreste de Kabul.
Las fuerzas francesas, desplegadas en la provincia de Kapisa, al noreste de Kabul, fueron movilizadas para dar con ellos.
UN EMPLEADO TRAIDOR
Los reporteros efectuaban desde hace varias semanas un reportaje sobre la construcción de una carretera en la zona que debía ser difundido en un programa especial a finales del mes próximo.
La última comunicación con su redacción tuvo lugar en la tarde del miércoles cuando aseguraron que se disponían a entrevistar a la población local.
Todo indica que su contacto local avisó a los talibanes, que montaron una emboscada a nuestros periodistas».
Otra periodista y cuatro soldados canadienses han muerto en Kandahar por la explosición de una bomba.