Las actrices eligen lo que hacen en las escenas y con qué actor lo hacen
’21 días’ muy esperados: anoche por fin los telespectadores tuvieron la oportunidad de ver cómo se desenvolvía la reportera Samanta Villar en la industria del porno. El papel de Samanta era una incógnita hasta la emisión. ¿Sería protagonista, directora o guionista?
Actrices, como Dunia Montenegro y Michelle Blanche, directores y productores compartieron con ella su día a día: le abrieron la puerta de los rodajes y la de sus casas. Con cámara en mano se atrevió a introducirse entre los entresijos del mundo del porno.
Samanta Villar:
«Ha sido una experiencia muy divertida, pero también muy sorprendente»
«Sorprendente porque muchas veces asociamos el mundo del porno al vicio y a la droga, cuando en realidad tiene mucho de normalidad y de vida cotidiana. Eso sí, la mentalidad de la gente es más liberal»
«La idea de que la gente del porno se hace millonaria, por ejemplo. Una actriz cobra 250 euros por escena, así que por dinero no están ahí. Entran porque conocen a alguien, ven que es un mundo normalizado, prueban y les gusta. A todo el mundo le gusta el sexo. Y a ellos les pagan»
Otra idea que resulta ser falsa es que los actores hagan cosas que no les apetece:
«Las actrices eligen lo que hacen en las escenas y con qué actor lo hacen»
Antes de acabar el programa, la periodista hace balance de sus tres semanas conociendo de primera mano los entresijos de la industria del porno y concluye que:
«Es curioso que al final ves a la gente ‘chingar’ como quien ve llover»
La reportera se declaró alucinada con los precios que se pagan en el porno: entre 200 y 300 euros por escena, que son unas tres horas de trabajo.