Juan Carlos Escudier no se quiso quedar al margen de la polémica suscitada por los comentarios sexuales, deplorables de la A la Z, de Salvador Sostres en un intermedio del programa «Alto y Claro» en Telemadrid el pasado 11 de noviembre.
Entre otras de las lindezas que salieron de su boca, destaca la siguiente:
«No me gustan las señoras espantosas que llevan la ropa interior sin combinar. Además, son muy mayores. A mí me gustan las chicas jóvenes de 17, 18 años, 19, que es ahí donde está la tensión de la carne de ese punto mágico».
Antes de abordar el problema de fondo, desde su punto de vista, el bloguero del periódico de Roures describe al «tal Sostres»:
«(…) El niño de una familia bien que ha hecho su fortuna en el negocio de la restauración y el catering. El citado se inició en las ‘Crónicas Marcianas’ de Sardá, que siempre fue un hacha descubriendo frikis, y cada cierto tiempo ha ido ganando en notoriedad, ya fuera por decir que el español es una lengua de analfabetos o por llamar borracho a Maragall».
Pero el periodista catalán no es el culpable, según Escudier:
El único responsable de semejantes afirmaciones no es otro que Sostres. Recordemos que no las hizo en una tertulia, sino en el descanso de una, concretamente la que se emite a última hora de la mañana en Telemadrid.
No obstante, es tan condenable en un caso como el otro. El responsable, por tanto, es sólo el periodista. El continente, no.
Las tertulias son unos buenos instrumentos para analizar y debatir la actualidad. Claro, si más que una tertulia, lo que se pretende hacer es un espectáculo, una lucha libre dialéctica, el resultado es obviamente catastrófico.
Hay abusos, pero muchas tertulias se desarrollan en unas coordenadas más que aceptables.
EL PAÍS ENTRA EN LA POLÉMICA
José María Izquierdo entró de lleno en la polémica en su blog «El ojo izquierdo» en el País. [18-11-2010]
Más adelante se hace una pregunta:
«¿Por qué están ahí, en TeleEspe, estos tres tenores, a los que se suma el forofo del menoreo, el ínclito Fernando Sánchez Dragó, y nuestro fiero Hermann Tertsch? Pues como hoy mismo digo en El País, se les ha contratado como premio por decir las cosas que dicen, y que ustedes tan bien conocen, y para que sigan diciendo esas mismas cosas en esa tele pública que sufragamos entre todos».
No es verdad, Isabel San Sebastián no le sigue el juego a Sostres. Le dice que si le ve acercándose a su hija, «te mato», le llama «enfermo» y le advierte de la presencia de niños en el plató.
VERDAD MENTIRA