Corre el rumor por la Puerta del Sol de que karmele Marchante, la auténtica, la que hace dos meses salió de Telecinco echando chispas, está en la acampada.
Y Karmele, tan peculair ella, tan dinámica en ‘Sálvame’, parece haber tomado un papel protagonista y se dedica con un grupo de ‘indignados’ del 15-M a plantar topmates en los parterres y a votar en las asambleas.
Aunque, según indicó en su día Jorge Javier Vázquez, la periodista ya había amenazado antes con dejar el programa por las disputas que en él mantenía con sus compañeros, pero parece que esta vez va más que en serio.
Parece que el problema surgió a principios de marzo, cuando Karmele se sintió víctima de una cámara oculta realizada por el equipo del programa a raiz de su participación en el espacio La Caja Deluxe.
En aquel programa, Karmele Marchante dijo haberse sentido muy mal durante su infancia en Tortosa, donde, aseguró, ahora es hija predilecta, y que no se sintió muy querida por sus padres. Algo que en Sálvame pusieron en duda mediante una posterior cámara oculta.
Con Karmele en el plató, el programa conducido por Jorge Javier Vázquez emitió la cámara oculta que habían realizado en Tortosa, en la que aparecían vecinos criticando a Karmele Marchante y dejando claro que no todo lo que había contado era cierto.
«¿Para qué ponéis una cámara oculta y no me lo decís? ¿Sabéis qué? Me voy del todo, me voy, me voy. ¿Cómo podéis tener la poca vergüenza de poner esto sin que yo lo sepa? Se acabó el jugar con las personas en este plató, estoy harta», gritó antes de marcharse.
Desde ese momento, Karmele había estado desaparecida, pero en la noche del jueves se la pudo ver en el estreno de La Gran Depresión, de Bibiana Fernández y Loles León. «No estoy escondida, he estado en Valencia, Barcelona, Bilbao», señaló a Europa Press.
Preguntada por las razones de su marcha, Karmele se limitó a «hacer oficial» que se va de Sálvame «de forma voluntaria». «Forma parte del oficio nuestro, lo nuestro es cambiar», añadió, señalando que ha pasado página.
«Me voy a Inglaterra a perfeccionar mi inglés», explicó Karmele, que se irá «tres meses como mínimo», rechazando rotundamente haber caído en una depresión y mandándole muchos besos «a todos en el plató, a toda la gente, a la dirección» de Sálvame.