La Academia de TV llevaba más de un año y medio trabajando en la preparación del evento. Reunir a más de 160 reputados profesionales de la pequeña pantalla en España desde sus inicios, en 1956, no se antojaba una tarea fácil. Pero lo cierto es que en la gala, celebrada el 6 de marzo de 2012, y apadrinada por los Príncipes de Asturias, apenas faltaron grandes nombres de la tv española. Ni Chicho Ibáñez Serrador, que lidia con algunos problemas de salud desde hace unos años, se lo quiso perder.
Preguntado Manuel Campo Vidal -el máximo responsable de la organización del acto-homenaje como presidente de la Academia de TV- por Periodista Digital sobre la confirmación al acto que le hizo más ilusión recibir, el periodista explica:
Todas, pero esta mañana cuando me han llamado y me han dicho, Narciso Ibáñez Serrador se había levantado con buen día y venía, me ha hecho especialmente feliz porque era duda hasta última hora.
Sobre las ausencias que más le duelen:
Dos personas que me conmueven especialmente. Antonio Mercero que fue presidente de esta academia y Concha García Campoy, mi querida amiga, pero que estará pronto con nosotros.
Pese a las muchas críticas que suscitó su participación en ellos, de su carrera en la pequeña pantalla, el presentador se queda con:
Los debates electorales porque son momentos muy excepcionales de la historia de España.
A veces han sido incomprendidos pero este país merecía tener unos debates como tienen en Francia y EEUU. Cualquier innovación siempre tienen a algunos que no lo entienden muy bien, pero eso forma parte del trabajo.
Entre los muchos profesionales homenajeados en el acto realizado en Villaviciosa de Odón, en la Universidad Europea de Madrid, se encontraba José María Iñigo, quien desveló a PD que sus retribuciones por colaborar en RNE (‘No es un día cualquiera’) y TVE (‘Las mañanas de La 1’) también se han visto afectadas debido al recorte de 200 millones de euros en las cuentas de RTVE:
Me han rebajado el sueldo tanto en televisión como en radio. Todos lo hemos sufrido. Unos más y otros menos. También pasa en la empresa privada en unos sitios porque hay crisis de verdad y en otros aprovechándose de la psicología de crisis. Ya vendrán tiempos mejores supongo.
*Con la colaboración de Sandra Besga.