Ahora en televisión, el físico es lo que tiene más peso
Es evidente que en España, el pecado capital por excelencia no es la lujuria o la gula, sino la envidia. Y como dice el viejo refrán español «Si la envidia fuera tiña, cuántos tiñosos habría».
Duele descubrir, que hasta a algunos o algunas de los que mejor instalados están, les afecta el mal.
La última ‘enferma‘ no es otra ahora que la periodista y presentadora de la Cadena SER Àngels Barceló, quien no ha resistido la tentación de referirse en tono despectivo a su compañera de profesión Sara Carbonero.
No viene al caso subrayar que Sara es mucho más joven, esbelta, guapa y popular que Àngels. El caso es que en una entrevista concedida a Jotdown, la del Grupo PRISA se despacha a gusto.
Y no sólo con la novia de Casillas, sino con todo el que se le cruza, incluido el programa ‘Punto Pelota‘ de Intereconomía TV.
La presentadora de Hora 25 en Cadena Ser critica con contundencia los gazapos cometidos por la comentarista de Telecinco durante la Eurocopa 2012:
«Hace unos días, Sara Carbonero le preguntó a Iniesta si le habría gustado tirar un penalti, cuando lo había chutado y lo había marcado. Imagínate que alguien hace esto en el Congreso de los diputados, que llega un periodista y le pregunta a alguien que acaba de ganar la presidencia del Gobierno si le habría gustado ser presidente. ‘Me acaban de nombrar’… A lo mejor soy excesivamente exigente con el trabajo de la gente, igual que con el mío».
Barceló se refiere al lapsus de Carbonero durante las entrevistas en la zona mixta con el centrocampista del F. C. Barcelona, y que dio pie a una larga lista de comentarios en redes sociales, e incluso, ha sido inspiración para revistas satíricas.
Quizá venga al caso recordar, que la veterana periodista catalana, fue una de las cabezas visibles de la cobertura realizada por Cuatro de los Mundiales de fútbol disputados en 2006 y 2010, así como de la Eurocopa 2008.
CARAS, CULOS, TIPOS Y KILOS
Su despectiva valoración de Sara Carbonero da pie a Barceló para entrar en el siempre controvertido asunto de los perfiles que las cadenas de televisión buscan en las presentadoras y periodistas.
Según la de la SER, los directivos priman la imagen en las mujeres antes que la experiencia:
«El físico era importante, pero también pesaba que supieras hacer las cosas bien. Yo creo que ahora esto no se tiene en cuenta, el físico es lo que tiene más peso».
Barceló echa la vista atrás y comenta lo alejada que ve la actual situación del mercado laboral televisivo con el de la época en la que estaba al frente de Informativos Telecinco, desde la segunda mitad de los noventa:
«Además acabamos de dar un paso tremebundo para atrás, sobre todo en televisión. Hubo una época en la que Olga Viza presentaba un informativo, Àngels Barceló presentaba un informativo… Había gente de una cierta edad y trayectoria que hacía periodismo en televisión, pero ahora la televisión ha optado por otro tipo de mujer periodista, y en esto hemos retrocedido muchísimos años. Hay un perfil de mujeres que ya no tenemos espacio en televisión, pero los hombres sí».
Como no iba a dejar pasar la oportunidad de arrimar el ascua a su sardina, Barceló pontifica que su labor en la ONda media se realiza un entorno más avanzado e igualitario:
«En radio no me he encontrado ningún problema: se ha confiado en mí y si soy mujer, soy mujer, no pasa nada».
Sobre la prensa deportiva:
«En ocasiones me pregunto si eso es realmente periodismo».
En la extensa conversación publicada en la revista digital, Barceló se reconoce como una entusiasta del deporte y del fútbol (es forofa del Barça), si bien puntualiza que no sigue la prensa deportiva:
«En ocasiones me pregunto si eso es realmente periodismo. Generan unos debates ficticios, que no existen. Son capaces de alimentar durante diez días que Piqué y Sergio Ramos no se llevan bien. Y a lo mejor es verdad, pero en la selección juegan maravillosamente bien los dos juntos. Entiendo que la gente lo necesite porque se evade y les gusta ese tipo de lectura, pero… Igual que te decía antes lo de Sara Carbonero y el penalti del otro día, me pregunto ¿y si hiciéramos esto nosotros? Claro que también hay medios no deportivos que lo hacen…»
A Josep Pedrerol, conductor del exitoso ‘Punto Pelota‘ de Intereconomía TV, también le suelta un mandoble, pero en forma de perversa insinuación:
«Cada uno escoge sus caminos. Eso te da audiencia, publicidad y dinero. Dió un salto de El día después en Canal + a su actual ocupación y lo suyo es un producto».
De la tertulia deportiva de Intereconomía (el único espacio que reconoce ver del canal de TDT) comenta que es capaz de seguirlo, si bien matiza y asegura que se engancha «cabreándome muchísimo, eso sí».
Especialmente le irrita el comportamiento de Tomás Roncero, madridista acérrimo y columnista del diario ‘AS‘.
Barceló también aprovecha para hablar a diferentes compañeros de profesión, comunicadores que están o no actualmente en el medio catódico. Entre otros, de Jordi Évole, Julia Otero o Andreu Buenafuente.
De la primera, que actualmente presenta Entrevista a la Carta en TVE, confiesa:
«Es una compañera en la que me veo muchas veces reflejada. Algunas tardes la escucho y me da la sensación de que somos muy intercambiables».
En cuanto a Évole, se declara ferviente admiradora de su trabajo en Salvados.
«Hace un programa que aborda temas que la televisión ya no aborda porque ya no se toca la investigación, la investigación y la entrevista, y él consigue hacerlo. Consigue que le contesten y que lo reciban, aunque también es verdad que lo consigue porque va con esa pinta de soy otra cosa, no soy exactamente un periodista».
«Pero me parece un ejercicio buenísimo de denuncia y de compromiso, y recuerda que he comenzado la entrevista diciendo que para mí el periodismo es compromiso».
Como si temiese haberse excedido en el elogio, suelta a rengñon seguido que Évole no es el único exponente de buen periodismo:
«Me parece fantástico, pero no me gusta que se diga que el único periodismo que se hace ahora en el universo es el de Jordi Évole, porque hay otra gente que también lo estamos haciendo».
De Buenafuente, al que admira y cuyos monólogos televisivos consideraba la «mejor desintoxicación del día» analiza el fracaso de su última aventura en televisión, Buenas noches y Buenafuente:
«No soy crítica de televisión, pero a mí me parecía un programa demasiado igual a lo que ha hecho siempre; le faltaba el efecto sorpresa. Lo digo como espectadora. Aun y así yo lo veía.»