El programa ‘La Mañana’ del viernes 1 de marzo de 2013, tras analizar la renuncia del Papa, aludió al tema de Bildu, momento en el que uno de los tertulianos, el ex fiscal de la Audiencia Nacional, Ignacio Gordillo lanzara un duro alegato contra el Tribunal Constitucional, al que negó su condición de órgano judicial.
Antes, el programa había comentado el tema de la renuncia del Papa y había contactado con el director del influyente ‘L’ Osservatore Romano’, Gian María Vian, sobre las especulaciones de la prensa en quién será el nuevo Papa.
Gian María Vian- Casi nunca aciertan
Bieito Rubido- Con Ratzinger se acertó
Gian María Vian- Para la elección de Benedicto XVI algunos sí. Pero muchos del sector de la prensa, después de la homilia como decano de Ratzinger dijeron que ya había abandonado la idea de ser pontífice porque era muy mayor. El cónclave más grande de la historia. Y se resolvió en 17 horas.
Cacho: «España es el valle de las desdichas, PP, PSOE, la Corona, está todo hecho jirones»
En ese momento el presentador del programa, Ernesto Sáenz de Buruaga, informó de que según la web de ABC el PSE (PSOE vasco) pedía que se pusiera en libertad a varios asesinos como Kubati, Troitiño o Parot.
Bieito Rubido- El PSOE se rompe, por un lado el PSC, por otro el PSE…
Luis del Val- El PSE está votando con Bildu.
Jesús Cacho- Eso me coloca en una observación más general. Nos damos cuenta de que en estos momentos estamos en el valle de todas las desdichas, todo hecho jirones, el partido en el poder con un caso como el de Bárcenas que no sabe como lidiarlo, el PSOE, para qué les voy a hablar. ¿La Corona? ¿Para qué les voy a hablar? La economía con el fantasma de Italia. Si no tuviéramos un Gobierno con mayoría absoluta, nos habríamos ido a pique. Y luego está el tema de Cataluña.
El fiscal Gordillo contra el Tribunal Constitucional
Que haya ataques contra el Tribunal Constitucional es algo habitual, en especial desde independentistas. Que se produzca por parte de un ex fiscal de la Audiencia Nacional, ya es algo más novedoso. Ignacio Gordillo fue un destacado fiscal de la AN que se hizo célebre por encabezar el llamado grupo de los ‘fiscales indomables’ junto a Eduardo Fungairiño o María Dolores Márquez de Prado, el grupo de fiscales más cercanos al Gobierno de José María Aznar que se enfrentaron a los sectores tradicionales (inicialmente alineados con los jueces Liaño y Garzón y luego fuertemente enfrentados con el segundo).
Buruaga pareció sorprenderse mucho de las palabras del fiscal, aunque no era un argumento nuevo.
Buruaga- ¿Pascual Sala no tenía otro margen de maniobra que legalizar Bildu?
Ignacio Gordillo- El Tribunal Constitucional no depende de la administración de la justicia, es un órgano político, lo que es una vergüenza…
Buruaga- ¡Pero hombre! ¿Cómo que es político? ¿Cómo puedes decir eso?
Ignacio Gordillo- El Tribunal Constitucional está formado por los políticos…
Buruaga- ¡Pero vamos a ver! ¿La independencia de la justicia es mentira o qué?
Ignacio Gordillo- Pero es que la administración de la justicia comienza en el Tribunal Supremo, no en el Constitucional.
Buruaga- Pero serán jueces que querrán ser justos. ¡Me acabas de hundir en la miseria!
Ignacio Gordillo- El Tribunal Constitucional es un órgano político, no se puede decir que forme parte del órgano de la justicia. La prueba está en que el Tribunal Supremo declaró la ilegalidad de Bildu.
Bieito Rubido- El juez que ha dicho que lo de Sánchez Gordillo está muy bien. ‘De hombres están hechos los jueces’, con su miseria.
Buruaga- Si te toca la sala 1 ganas, si te toca la sala 2 pierdes.
Ignacio Gordillo- Esa resolución del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía es inadmisible. Porque se ve como una empleada es violentada.
Luis del Val- ¡Valientemente con arrojo y sin hábito de cobardía! ¡Ahí estaba el sindicato contra la empleada!
Buruaga- Para ser viernes vais contentos
En el mundo judicial la máxima instancia es el Tribunal Supremo, de ahí que exista un conflicto desde hace años (especialmente recrudecido desde 2004) por el hecho de que el Tribunal Constitucional se haya convertido en una especie de ‘tercera sala’. Los puestos del Supremo son elegidos por el CGPJ, que elige entre jueces que cumplan determinados mínimos para cada puesto, mientras que los miembros del Tribunal Constitucional son elegidos por el Congreso de los Diputados y no precisan ser jueces para ocupar cargos (de hecho, es habitual ver a catedráticos en el citado órgano, aunque también ha habido jueces como Pascual Sala o el fallecido Roberto García Calvo.