A la cabeza está Cataluña, con seis canales, seguida de País Vasco y Valencia, ambas con tres
Tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid sobre el ERE de Telemadrid, que ha declarado improcedente, el debate de las televisiones públicas vuelve a la palestra.
Los 891 trabajadores tendrán que ser indemnizados aunque no recuperan su puesto.
En el programa ‘El Gato al Agua’, de Intereconomía TV, dirigido por Javier Algarra, se emitió este 9 de abril de 2013 un informe sobre el coste de las televisiones públicas.
«España es uno de los países que más televisiones públicas tienen por cada 1.000 habitantes, hasta 34, una media de dos por Comunidad Autonóma, sin tener en cuenta las delegaciones autonómicas de TVE y varias decenas de televisiones municipales que se emiten por Internet».
El coste total alcanza casi los 1.200 millones de euros al año.
La televisión estatal, TVE tiene un déficit de 60 millones de euros. A cada español le tocaría pagar 1,27 euros al año para hacer frente al gasto.
En 2010, el coste de las televisiones alcanzó los 152 euros por familia. 68 corresponden a TVE frente a los 84 euros con los que se mantiene las televisiones autonómicas.
A la cabeza está Cataluña, con seis canales, seguida de País Vasco y Valencia, ambas con tres.
Galicia, Andalucía, Madrid y Canarias presupuestan dos televisiones mientras que Asturias, Castilla-La Mancha, Aragón, Islas Baleares, Murcia, Ceuta y Extremadura sólo tienen una. Además, Cataluña, País Vasco y Valencia tienen vía satélite para emitir al resto del mundo. Solo cuatro CC AA no tienen televisión, Cantabria, Navarra, La Rioja y Castilla y León.
Así, España se sitúa entre Italia y Francia y Alemania. El coste en el país trasalpino es inferior a 130 euros mientras que los alemanes gastan 220 euros.
Un coste superior a los 170 euros que sustentan los británicos. La pregunta que se lanza ahora es Si es posible mantener las televisiones autonómicas.
Al respecto de estos datos, Eduardo García Serrano, periodista de Intereconomía, ha indicado que las televisiones autonómicas se siguen utilizando por parte de los presidentes autonómicos como plataformas políticas y propagandísticas.
Además, ha afirmado de forma contundente que las eliminaría «sin duda alguna».
Serrano, señala que «los políticos cuando están en la oposición tratan a los medios como a una amante y cuando llegan al poder los tratan como un maltratador a su mujer».
El político mima al periodista en la oposición y cuando llega al poder los desprecia al tener bajo control los medios públicos.
Además, ha criticado a los políticos españoles porque «son los peor educados del mundo».
En la misma línea se ha mostrado Santiago Abascal, presidente de DENAES, quien considera necesario abrir el debate sobre el cierre de televisiones públicas. Así, destaca que el caso de Cataluña es «sangrante».