La presidenta del PP de Madrid ha respondido el 4 de abril de 2013 a entrevistas telefónicas para prácticamente todas las radios y televisiones de ámbito nacional españolas, para ofrecer su incidente con los agentes de movilidad del Ayuntamiento de Madrid el día anterior. Especialmente tensa ha resultado la conversación que ha mantenido Esperanza Aguirre con el presentador de Las Mañanas de Cuatro, Jesús Cintora. Tanto que ha terminado colgándole el teléfono.
Cintora le dice que le va a hacer preguntas basadas en el atestado de la Policía Local. Aguirre responde:
Yo no me voy a poner a discutir el atestado de la Policía Local. Si a usted le interesa mi versión yo se la doy, si no le interesa pues siga usted contando el atestado de la Policía Local.
Lo que dice la Policía Local de que yo me di a la fuga mientras me ponían la multa es falso. Entonces como es falso, yo ya lo discutiré donde sea; en la comisaría, en los tribunales, donde sea.
A lo largo de la respuesta, Cintora le intenta interrumpir varias veces. Insistiendo: «¿Me va a dejar preguntar?». Aguirre continúa:
Usted me quiere condenar a cuatro años de cárcel o más.
Cintora: Yo no le quiero condenar a nada.
Aguirre: Acabo de escucharlo, su programa. Y no me choca nada.
Cintora sigue tratando de hablar más alto que Aguirre y al mismo tiempo que ella:
Yo de verdad, intento con la mayor humildad hacerle preguntas. Preguntas basadas en, por ejemplo, un atestado de la Policía. Yo no he dicho que a usted la condenen de nada. Yo he planteado lo que puede ocurrirle a usted con la ley.
Aguirre: No, acaba usted de decir a todo lo que me pueden condenar. Lo acabo de oír.
Cintora: Yo insisto en querer hacerle preguntas. Y le pregunto.
Aguirre: Pues venga, pregunte.
Cintora sigue preguntado, insistiendo en que se basa en un atestado de la Policía, y Aguirre niega lo que él dice y repite varias veces que «todo se puede demostrar».
Aumenta la tensión cuando el presentador de Cuatro pregunta la presidenta del PP sobre qué haría si cámaras en la Gran Vía hubieran grabado lo ocurrido y fuera algo distinto a lo que ella dice. La política responde que está todo grabado y que se corresponde con su versión. Continúa la conversación:
Cintora: En ese caso, señora Aguirre, si lo que mostrasen las cámaras no fuera lo mismo que usted está contando…
Aguirre: Van a mostrar lo que ocurrió, que es exactamente lo que yo le estoy diciendo…
Cintora: Insisto…
Aguirre: Y si le interesa bien, y si no pues siga usted con su versión. ¿Qué quiere usted que le diga?
Cintora: Me gustaría terminar de preguntar, señora Aguirre. ¿Es posible?
Aguirre: Pues venga, dígame. Una pregunta más es posible.
Cintora: En el caso de que… No sé. Viendo lo que me está costando entrevistarle me estoy explicando lo que pudo ocurrir con los agentes, porque la noto, señora Aguirre… Yo trato de preguntarle con la mayor humildad del mundo, sin ningún mal rollo de verdad, señora Aguirre.
Aguirre: Todos los espectadores de su programa, y todos los españoles, saben el rollo suyo, que va de amor a Esperanza Aguirre no es exactamente, ¿eh? Lo saben ya todos, usted no se preocupe por eso.
Cintora: Por mis entrevistados, señora Aguirre, no tengo ni amor ni odio. Hago preguntas.
Aguirre: Hombre, por algunos tiene más simpatía que por otros, y yo soy de los que por usted tiene cero simpatía.
Cintora: Hago preguntas y habitualmente me dejan hacerlas. Usted no me está dejando hacerlas.
Aguirre: Venga, haga una pregunta y una pregunta le contesto con mucho gusto.
Cintora: De acuerdo. Aparte decir que no me gusta que me digan lo que tengo que hacer y lo que no. Se lo digo, ¿vale? Yo pregunto, usted ya libremente podrá decidir si responde.
Aguirre: Haga usted lo que quiera, estamos en un país libre.
Cintora: ¿Ha pensado en dimitir con esto que ha ocurrido? Pensando en un dirigente político. Nos está viendo mi abuela, y ve a un dirigente político como usted, que igual hasta le admira, vete tú a saber, señora Aguirre, de verdad, se lo digo con la mayor humildad, y ve que un dirigente político le paran en la Gran Vía, le paran en la Gran Vía…
Aguirre: Ya me ha hecho la pregunta, la respuesta es no.
Cintora sigue: Le están multado, no deja que le multen, se va, la policía le dice que se detenga, no se detiene…
Aguirre: La respuesta es no y no.
En ese momento, se corta la comunicación. En el estudio se ríen y se cruzan comentarios.
Anton Losada: Es la segunda vez que se da a la fuga en 24 horas.
Cintora: Cada uno se retrata por sus hechos, es lo que hay.
Losada: Supongo que no te acusará de machista.
Vuelve a llamar Esperanza Aguirre, que saluda diciendo:
Perdone, que se ha cortado.
Cintora: ¿Se ha cortado, pensábamos que había colgado usted?
Cintora insiste en la pregunta de la dimisión y relatar lo que dice el atestado. La conversación se mantiene en términos similares, aunque con variaciones. Después de que Aguirre dijera que sólo una pregunta más, todavía se plantean un par de cuestiones. La última:
Cintora: ¿Y en otro país cree que esto supondría una dimisión?
Aguirre: Mire, no, ¿vale? Pues muchísimas gracias y continúe usted con su atestado policial, su versión y su a-versión hacia mí. Muchísimas gracias.
Cintora: Ningua aversión, señora Aguirre.
Aguirre: Hasta luego.
Acto seguido, la presidenta del PP cuelga.
Cintora concluye:
Muchísimas gracias por habernos atendido, a su manera pero nos ha atendido, y que nos haya vuelto a colgar de esta manera. Allá cada cual.
