"Creo que no fue un ejemplo de lo que debería ser un debate político en nuestro país"
El pasado sábado 19 de julio de 2014 el show de laSexta ofreció un regalo televisivo para el espectador ávido de debate político de alto nivel. «Dos miuras», Esperanza Aguirre, especialmente activa a nivel mediático en los últimos tiempos, y Pablo Iglesias, aupado por la propia cadena de Atresmedia y por Mediaset a su nicho político que mantiene hoy con Podemos, se enrolaban en un careo que solo pudo haber sido superado de estar presente en el plató la presidenta del PP en Madrid, en lugar de vía telefónica —Esperanza Aguirre acorrala a Pablo Iglesias: «Repita usted conmigo: todos los etarras son unos asesinos»–.
Parecía evidente que más allá de ‘La Sexta Noche’ el debate continuaría en los medios y amenaza con seguir haciéndolo. La propia Esperanza Aguirre, al día siguiente del combate dialéctico, participó en ‘La Marimorena’ de 13TV, de modo que fue contestada por Pablo Iglesias desde ‘Las mañanas de Cuatro’ solo dos jornadas después. Por último, de nuevo el político de Podemos, entrevistado ahora por ‘Al Rojo Vivo’ de Cristina Pardo en ausencia veraniega de Antonio García Ferreras, volvía a insistir en el debate con la política del PP este 24 de julio de 2014:
«Precisamente como no está ahí para defenderse [Esperanza Aguirre] y como el debate ya lo tuvimos, yo creo que es absurdo repetir el debate. Está subido en la página web de laSexta y lo pueden consultar ahora mismo todos los espectadores. Lo único que puedo decir es que a mí el debate no me gustó, creo que los debates políticos tienen que ser serios».
«Entiendo el éxito de audiencia, entiendo la expectación que crea, entiendo que fórmulas como dos miuras muy valientes enfrentándose en televisión es garantía de mucho éxito televisivo y yo me presto a ese juego encantado. Pero si me preguntas si me gustó el debate, no, a mí me encantaría discutir con la señora Aguirre o con cualquier persona del PP en serio, sin insultar, sin demagogia, sin mentir, sin espectáculo, sin ‘repitas conmigo’. Entonces creo que no fue un ejemplo de lo que debería ser un debate político en nuestro país».
Y es que el líder de Podemos ha empezado a combinar con cierta asiduidad sus intervenciones en ‘Al rojo vivo’ de laSexta, a pesar de competir en franja horaria con su presentador del alma, Jesús Cintora y ‘Las mañanas de Cuatro’ —laSexta quiere atar a Pablo Iglesias y él les da calabazas: «Tengo un compromiso moral con Cintora»–. Además, parece extraño que Pablo Iglesias hable ahora de querer un debate sin espectáculos, sin demagogia y sobre todo sin insultos, cuando solo 24 horas antes se despachaba a gusto contra la periodista Isabel San Sebastián —San Sebastián pone en evidencia al estalinista de Podemos: «Buscó chivatos en Cuatro que le hablasen sobre mí»–.