Tardá: "Me parece francamente lamentable que el señor Inda diga esto pensando en ERC. Inda, yo creo que hay líneas rojas que uno no puede cruzar..."
Parecía tranquilo el verano hasta que estalló una bomba en Cataluña. La de mayor metralla a nivel político de las últimas décadas, desde la misma Transición. Jordi Pujol, quien fuera ‘Honorable’, acaba de dejar de serlo al conocerse la punta del iceberg de una presunta trama de corrupción desde su cargo al frente de la Generalitat de más de dos décadas.
Todos los programas televisivos de índole política analizan durante estas fechas el delicado y doloroso asunto catalán. ‘Al Rojo Vivo’ de laSexta presentaba dicha propuesta durante el mediodía de este martes 29 de julio de 2014. Con Cristina Pardo en la conducción del programa, uno de los tertulianos presentes fue el diputado por las Cortes Generales de España, Joan Tardá, un personaje de la política catalana y nacional ciertamente polémico desde el atril y en su paso por los debates televisivas —Tardá insulta a Carmen Tomás: «¡Tendríamos que subvencionar a todos los fascistones! ¡Está enferma y es ridícula!»–, —Tardà monta el número en el Congreso hablando catalán y Posada le expulsa sin contemplaciones–.
De igual manera, el equipo de laSexta entrevistaba a uno de sus colaboradores habituales, en esta ocasión desde fuera del plató, Eduardo Inda. El adjunto a la dirección del diario El Mundo explicaba con pelos y señales cómo se está produciendo el descubrimiento de las cuentas millonarias de la familia Pujol en el exterior:
«Esto es un chiste barato que no se cree nadie. Es que lo dijo Maragall en sede parlamentaria y lo dijo la UDEF. Es que nosotros hemos probado documentalmente que el señor Jordi Pujol Ferrusola tiene cuentas en Suiza y la familia Pujol en solo una cuenta en Ginebra tiene 137 millones de euros. Lo de las herencias y que me ha tocado la lotería pues está bien pero no se lo cree nadie. Ya lo contó Fabra y lo cuentan todos los corruptos pero eso no se lo cree nadie».
«Aquí lo que hay es un robo sistemático de las arcas públicas, un cobro de comisiones sistemático durante 23 años, y una fortuna de dimensiones propias de dictadores de África, Oriente Medio o América latina. Estaríamos hablando de uno de los mayores blanqueos, si no el mayor, de la historia de España».
Aquí viraba Inda en su discurso y apuntaba directamente a Joan Tardá, sentado escuchando en el plató de laSexta:
«Por cierto, al amigo Tardá le quiero recordar que en Cataluña la corrupción de los Pujol era vox populi desde hace veintitantos años, pero nadie decía nada ni hacía nada porque era un status quo similar al que se padece en algunas regiones de Italia».
Se vino entonces la respuesta del aludido y la confrontación:
Tardá: «Me parece francamente lamentable que el señor Inda diga esto pensando en ERC. Inda, yo creo que hay líneas rojas que uno no puede cruzar… Decir que ERC conocía la corrupción de la familia Pujol es insultante…»
Inda: «Lo sabíais toda la clase política de Cataluña y lo callabais».
Tardá: «Esto es una mentira y repito, incluso ya no es utilizar el falso testimonio a nivel particular sino universalizarlo. Repito, acusar a ERC o a otras fuerzas políticas de izquierda catalana…»
Inda: «Yo he dicho la clase política… ¡Es que lo dijo Maragall en sede parlamentaria!»
Tardá: «Cuando el presidente Maragall dijo esas palabras estaba gobernando el Tripartit, y ERC estaba en él, y fue una frase que luego retiró».
Inda: «Una frase que dijo y luego retiró por las presiones. Todo el mundo en la clase política sabía lo que pasaba en Cataluña y nadie hizo nada por contrarrestarlo. Esa es la realidad de las cosas y cualquier otro comentario no se lo cree nadie, señor Tardá».
Tardá: «Me parece que usted en ese sentido no solo es injusto, sino que miente».