De forma natural, como muchas noches anteriores, ese viernes, quedaron grabadas las conversaciones privadas de los tertulianos, a través de la salida de video del estudio B4, que es el del Canal 24 horas
Algunos, como los despistados de Infolibre y varios de los que confunden el periodismo con el masaje, han presentado la grabación como la gran exclusiva, como la prueba palpable de que a su amigo Pablo Iglesias, líder de Podemos, lo ‘emboscaron‘ unos periodistas perversos el pasado 5 de diciembre de 2014, cuando acudió acompañado por una ‘troupe‘ de 15 colegas al Pirulí de TVE para ser entrevistado en el Canal 24 horas.
El asunto tiene coña, pero ha copado páginas y titulares hasta en los grandes diarios nacionales -incluidos ‘El País’ y ‘La Vanguardia’– por lo que creemos en Periodista Digital que merece que le dediquemos unos párrafos.
Hay varias e interesantes preguntas en el aire. ¿Qué dijeron y urdieron los supuestos conspiradores? ¿Quién grabó y cómo su conversación antes del programa? ¿Cómo se difundió el audio y quién lo hizo? ¿Qué fue realmente lo que comentó Sergio Martín, cuya cabeza han pedido histéricos desde su predecedor Xabier Fortes a CCOO o UGT, pasando por Podemos y un sinfin de supuestos colegas aparcados en las tertulias radiotelevisivas?
Los hechos, sucintamente, se desarrollaron así: Minutos antes de que comenzara la entrevista, con Pablo Iglesias sentado ya en el plató -insistió en que no quería estar en momento alguno con los periodistas que iban a asistir al programa-, Sergio Martín salió del estudio y consciente de que todas las miradas iban a estar puestas en él, pidió tranquilidad a los tertulianos.
«Buen rollo, buen rollo. La clave esta noche es que no puedan decir que es una encerrona».
Alfonso Rojo, director de Periodista Digital, le contestó entre risas: «¡Ni agua, ni agua! Al enemigo, ni agua».
En el trozo de pasillo que hace las veces de sala de espera y en el que hay un pequeño sofá y cuatro sillas, aguardaban también el profesor universitario Julio César Herrero y los periodistas Antonio Papell y Graciano Palomo.
En el audio de esos instantes, que ha sido colgado en Internet con cortes bastante intencionados, se puede escuchar como Sergio Martín añade: «Hay que estar tranquilos; no hay que darles motivos».
Todo, mientras se oyen carcajadas y cierto barullo. Incluso hay un momento en que Graciano Palomo pide a Alfonso Rojo: «Escucha un poco, deja hablar…»
Rojo, inasequible a los consejos, seguía bromeando y repite: «Ni agua, al enemigo ni agua.»
Pese a los esfuerzos de Martín para lograr que el director de Periodista Digital se callase («¿Pero que dices tú?»), Rojo parece no prestarle atención y trata de contar algo al resto de tertulianos: «Traigo una cosa aquí que…»
El audio acaba con una broma de Alfonso Rojo quien -en interpretación de ‘La Vanguardia’– parece alentar a sus compañeros a «hacerse cargo» de la nutrida y fornida troupe que acompañaba a Pablo Iglesias y que a esas horas, tras haber ocupado la zona de maquillaje, comenzaba a inundar el plató y sus aledaños: «Graciano, a ti te toca darle al alto, tú al de seguridad y tú al de comunicación.»
A falta de algún detalle cómo que en la mesa había una botella de agua y seis copas, es lo que ocurrió antes de entrar a plató, posar para unas fotos todos juntos e iniciar una entrevista en la que los únicos momentos de tensión fueron los protagonizados por Rojo, al preguntar por el IVA no pagado en la productora de Iglesias, a lo que replicó el líder de Podemos con la supuesta ficha ‘policial‘ del periodista y cuando Sergio Martín, al hilo de la reciente liberación de terroristas etarras, incluida la del asesino múltiple Santi Potros, comenta:
«Si uno pone Pablo Iglesias en Internet aparecen miles de vídeos del pasado, presente, del pasado lejano… Y hay uno en el que hemos visto a Pablo Iglesias defender la salida de los presos de ETA de las cárceles. Esta semana está usted de enhorabuena entonces».
Al margen de eso y teniendo en cuenta que a los tertulianos sólo se les permitió hacer una pregunta, sin posibilidad de repreguntar, y a Pablo Iglesias se le dejó soltar todo tipo de discursos, poco más.
Respecto a la grabación, hay que explicar algunas cosas. El Canal 24 horas empieza a grabar automáticamente todas las noches desde las 22:00 horas, un cuarto de hora largo antes de iniciarse la tertulia.
El hecho de que el 5 de diciembre, cuando Rojo, Graciano, Herrero y Papell tenían ya puestos los micrófonos, se estuviera grabando es tecnicamente normal.
Lo que se graba pasa al sistema informático compartido por todos los trabajadores de Torrespaña. Incluso alguno más que trabaja en Prado del Rey tiene acceso.
De forma natural, como muchas noches anteriores, ese viernes, quedaron grabadas las conversaciones privadas de los tertulianos, a través de la salida de video del estudio B4, que es el del Canal 24 horas.
Cualquier empleado de TVE con interés en hacerlo pudo acceder a la grabación desde su ordenador, aunque el sentido común sugiere que lo más probable es que lo que se ha difundido, en concreto, fuera copiado por un miembro del equipo de 24Horas o por uno de los circunspectos dirigentes sindicales, que pululaban esa noche por la zona. Le bastó poner su teléfono movil junto al altavoz del ordenador y darle al play.
Quien fuera, en todo caso, se ha cubierto las espaldas filtrando a Infolibre o Vertele, que estábamos dentro del plató aguardando a Pablo Iglesias, cosa que no es cierta. Se puede comprobar en la grabación, que los tertulianos estaban fuera, en el pasillo.
Otra matiz interesante es que la grabación filtrada sea de tan mala calidad. Da la sensación de que lo han grabado con un teléfono, acercándolo a los altavoces de un ordenador.
Cae por su peso que el aprendiz o aprendices de espía, ante la muy improbable eventualidad de que la dirección de TVE tomase medidas contra ellos por ‘deslealtad‘, camuflaron su jugada para hacer creer al personal que fue una grabación directa, no a través del sistema informático del ente público.
Llegados a este punto, para que los lectores puedan hacerse una idea más cabal de todo el embrollo y entender por que el director de Periodista Digital, choteándose de los periodistas-masajistas y de los aprendices de agente secreto, ha comentado que sólo va al baño en casa, reproducimos lo que escrito al respecto el sindicato USO («La gente entenderá nunca voy al cuarto de baño en TVE».
Lleva como título «se autoproclaman demócratas y utilizan métodos fascistas«:
«Ilegal, inmoral y delictiva. Esa es la deriva que ha tomado el sindicato CCOO en su política propagandística para convertir CRTVE en un ‘Vietnam’, como pidieron en su reciente comunicado. Y no lo decimos nosotros, sino la Ley y el Estatuto de la Información».
«El juez Garzón fue expulsado de la carrera judicial por prevaricar, o sea por utilizar grabaciones ilegales con los detenidos de un proceso. Un delito que ahora ha repetido CCOO utilizando de forma sesgada, parcial e interesada el contenido de las conversaciones previas de los protagonistas de un programa, mientras se probaban los micrófonos en la sala de espera».
Eso es lo que hacían los ‘soviets’ en los tiempos de Lenin y ya sabemos cómo acabó el experimento comunista.
Nos preocupa el perfil personal y profesional de quienes han realizado y filtrado la grabación ilegal. Y sobre todo, de quienes las han utilizado de forma egoísta e irresponsable sin medir el descrédito que se deriva hacia los trabajadores de esta casa y la imagen de la CRTVE entre los ciudadanos.
La grabación es un ‘off the record’ que cualquier profesional de la información, debidamente formado e instruido en la universidad, sabe que no tiene ninguna validez y no puede ser utilizada sin saltarse las históricamente consensuadas normas deontológicas que limitan el desempeño de la profesión.
Pero además, y para ahondar en su reprobable actitud, nuestros ‘compañeros‘ han manipulado el contenido de esas frases para acomodarlas a su violenta política sindical.
USO han tenido acceso a esa grabación original de los momentos previos a la entrevista a Pablo Iglesias en el Canal 24 Horas y tenemos la transcripción completa.
Sergio Martín, director del Canal y del programa La Noche en 24 Horas, coordina el desarrollo del guión con los tertulianos. No son consignas, sino constatación de que dirige el programa que presenta. Por cierto, los mismos tertulianos de cada viernes ya que no se hizo un ‘especial‘ por la presencia de Pablo Iglesias.
Y por eso dice eso del «buen rollo» instando a unas preguntas no agresivas, o impropias de un medio público, que puedan ser utilizadas por los sectores afines a Podemos como una coartada en su propaganda sobre la hostilidad de CRTVE contra sus programas políticos. Postulados que, por lo visto, parecen coincidir con los de CC.OO. ya que obvian el latiguillo con el que Martín acaba la frase: «ya sabéis… y tal y cual…»
Una manipulación en que vuelven a repetir cuando el director del programa afea la frase del tertuliano Alfonso Rojo cuando dice eso de: «al enemigo, ni agua».
El director del programa le reprocha: «¿pero qué dices?».
Como eso tira por tierra los intereses propagandístico-político-ideológicos de CC.OO, sencillamente lo eliminan convirtiendo la frase en un evidente e innegable ‘fuera de contexto’.
Vamos, todo un manual de lo que no se debe, ni se puede hacer con la información y que recuerda los utilizados por los regímenes fascistas de la Alemania nazi o del KGB de Stalin.
Una metodología impropia e inadecuada en unos «compañeros profesionales» de un medio de comunicación, cuyas bocas siempre están llenas de la palabra «manipulación«.
No se puede criticar a los demás de manipulación, mientras se manipula o se incumplen las normas éticas sobre información y comunicación. ¿O si…?
Y si pudiera quedar alguna sombra de duda, CCOO no dice cómo en esa grabación Sergio Martín pacta con Iglesias, igual que se hace con cualquier otro invitado, el tono y el contenido de las preguntas.
Le adelanta que no hay ningún ánimo de animadversión y le comenta los temas que expondrá y hasta le dice cuál será la primera de las preguntas.
Esto, por lo visto, tampoco favorece sus intenciones propagandísticas, aunque sea una prueba evidente de la declaración de buenas intenciones que se produjo en los momentos previos al encuentro en directo.
Ya dijimos «por sus actos les conoceréis». Si esa es su visión del sindicalismo, que no cuenten con nosotros. Y, por supuesto, que no metan en el saco de forma unilateral «a todos» los trabajadores de CRTVE. Eso es lo que hacían los ‘soviets’ en los tiempos de Lenin y ya sabemos cómo acabó el experimento comunista.