La reaparición de Juan Carlos Monedero en un acto en la madrileña localidad de Leganés en la tarde-noche del 29 de enero de 2015 ha sido una de las noticias que, lógicamente, tenían que tener su relevancia en las tertulias políticas de las televisiones.
El ideólogo de Podemos volvió a hacer de las suyas impidiendo a los medios gráficos acceder al interior del recinto donde ya, libre de la prensa, pudo lanzar a sus anchas las amenazas contra Montoro, los medios, la casta. En fin, lo de siempre. Todo le vale con tal de no dar explicaciones ni sacar las facturas que justifiquen la legalidad fiscal de los 425.000 euros –Monedero confiesa que los bolivarianos le enchufaron 425.000 euros por asesorarles-.
En ‘El Programa de Ana Rosa’ de este 30 de enero de 2015 se abordó en profundidad lo sucedido con Monedero y su repentina alergia a la prensa, algo que la propia periodista había deslizado en la tertulia del día anterior –El zas en toda la boca de Ana Rosa a Monedero: «Antes venía al programa y ya no viene nunca»-.
Fernando Garea (El País), Pilar Gómez (La Razón), Carmelo Encinas, Guillermo Fernández Vara (PSOE) y Albert Rivera (Ciudadanos) le dieron un buen rapapolvo al número tres de Podemos.
Ana Rosa Quintana introducía así la pieza:
Ayer había montada una espectacular porque había mucha expectación con la reaparición de Monedero tras la polémica por los 425.000 euros que cobró de varios gobiernos hispano americanos. Pues bien, ayer fue a un mitin de Podemos en Leganés, que era un mitin pensando en la manifestación del 31 de enero de 2015 y lo sorprendente es que, con toda la prensa esperando, entró por la puerta de atrás, custodiado por su gente, no se pudo acercar ningún periodista, es decir que no hubo posibilidad de hacerle ninguna pregunta y una vez en el atril, se declaró la guerra.
El más certero en el diagnóstico sobre el papelón que hizo Juan Carlos Monedero negándole el pan y la sal a la prensa fue el líder de Ciudadanos, Albert Rivera:
Están perdiendo los papeles. El discurso de los bandos ya es muy viejo en este país. Y la idea de que cuando a ti cuando te investiga Hacienda le pegan una bofetada a todos los españoles es más bien al revés. Todos los españoles que somos Hacienda queremos saber de Monedero lo que hace con sus impuestos. Ese mensaje de que yo soy el pueblo, yo soy la calle me parece un error. España no necesita bandos. Lo que está claro es que para escaparse de los periodistas ya tenemos a Rajoy.
Carmelo Encinas, por su parte, añadía:
Monedero no le tiene miedo a Montoro, a quien teme es a los medios de comunicación. Los de Podemos siempre van con una guardia pretoriana a su alrededor, tiene que hacérselo mirar y eso no dice nada a favor de su limpieza.