La detención de Rodrigo Rato en la noche del 16 de abril de 2015, su posterior puesta en libertad horas después, y la continuación del registro en su despacho de la madrileña calle Castelló ha desplazado de la escalera informativa toda noticia que no tenga que ver con el vía crucis por el que atraviesa el exdirector gerente del FMI, expresidente de Bankia y el que fuese hombre fuerte de la parcela económica de los Ejecutivos de José María Aznar.
La mesa política de ‘Más Madrid’ (Telemadrid, 12.20 horas) arrancó este 17 de abril de 2015 con esta cuestión. El director de La Razón, Francisco Marhuenda, defendió la tesis de que lo sucedido con Rato es una prueba inequívoca de que el sistema funciona.
Marhuenda afirmó que Rato no esperaba este desenlace de los acontecimientos:
Hace poco más de una semana estuve con él y lo vi con absoluta normalidad, tranquilidad, no le vi con ningún tipo de preocupación, más allá de que su defensa en el tema de Bankia y la convicción de que el había actuado conforme a derecho y que no había ninguna irregularidad ni nada. Luego supimos el tema este de que había regularizado, pero no sabemos qué es lo que ha regularizado.
Subrayaba que:
Ayer decíamos, y lo publicábamos, que todo esto venía ligado a las posibles responsabilidades de Bankia, cosa que sorprende que el juez no se centre en el caradura de Blesa y se dedique a Rato, me llama la atención. Más allá de todas las teorías conspiranóicas de la izquierda, hay que decir que el Estado de derecho funciona y que aquí la Agencia Tributaria funciona, los fiscales funcionan y que no son marionetas al servicio de éste ni de cualquier otro Gobierno. Luego se equivocarán porque, salvo la izquierda, que son infalibles…
