Emiliano García-Page, nuevo presidente de Castilla La Mancha, que tanto despotricaba contra la ‘politización‘ de RTVCM cuando no era él quien mandaba en la región, sino la popular María Dolores Cospedal, coloca a los suyos y polítiza ‘sus‘ medios de comunicación sin rubor alguno.
Cae García Page, de forma descarada, en el mismo error que en su día el PSOE denunciaba desde la oposición, cuando se ponía rojo de rabia cada vez que escuchaba el nombre de Nacho Villa, director general durante los pasados cuatro años en RTVCM a propuesta de Cospedal.
Y es que el perfil de Carmen Amores, que ha sido propuesta por el Consejo de Gobierno de la comunidad castellano-manchega para hacerse cargo de la televisión pública no parece el más idóneo para el modelo de televisión pública que ha prometido el socialista.
Y es que Amores, según ha podido saber Periodista Digital, aterrizó en RTVCM bajo el paraguas de Jordi García-Candau, antecesor de Nacho Villa en el cargo bajo el gobierno socialista de José María Barreda, y de funesto recuerdo para las arcas del conglomerado mediático de dicha comunidad, que quedaron maltrechas–¡Cómo les gusta el lujo a los progres! Candau gastó 36.600 € en bolsos y carteras de Loewe–. García-Candau creó un cargó ‘ex profeso’ para Amores: técnico de programas.
Previamente, Amores ya había tenido relación con RTCVM desde las filas de Mediapro en el programa ‘Tal como somos’, del que era directora adjunta y que alcanzó notoriedad por el escandaloso sueldo mensual que cobraba su presentadora, Teresa Viejo: 22.000 euros procedentes de las arcas públicas–Nacho Villa denuncia que García Candau gastó 541.240 euros en «informes fantasma» para RTVCM–.
La etapa de Carmen Amores en la televisión pública castellano-manchega llegó a su fin en abril de 2010. Fichó por Vocento para la puesta en marcha de La 10.
Sin embargo, se da la circunstancia que, tras solicitar su regreso a RTVCM, el cual le fue denegado, acabó por demandar a su antigua empresa, a la misma a la que ahora regresa por todo lo alto. Según fuentes internas a las que ha tenido acceso PD, la misma fue de carácter laboral y continúa abierta.
Fuentes de la televisión autonómica han recordado a este medio que su mayor temor, sin embargo, no es su adscripción ideológica (a pesar que su pasado en la TV de García-Candau, Bono y Barreda se completa con una estancia en Canal Sur, también bajo paraguas socialista) sino la entrada de contratos con las productoras con las que ha tenido contacto en el pasado (Boomerang, Mediapro…), que romperían así la línea iniciada en la última etapa en la que se apostaba por la producción propia en el seno de RTVCM.
PD se ha puesto en contacto a lo largo de la tarde de este 21 de julio de 2015 con Canal Sur, actual empresa de Amores, para contactar con ella, sin éxito.