David Gistau: "Parece que el himno español es el único que hay derecho a vapulear, sin pisar ninguna susceptibilidad personal o milenaria"
Un total de más de un millón de euros de multa ha solicitado la Comisión Estatal contra la Violencia a diferentes organismos por su responsabilidad en la pitada al himno nacional de España ocurrida en la final de Copa del Rey del pasado sábado 30 de mayo de 2015 —La Comisión contra la Violencia propone multas a la Federación, Barça y Athletic por los pitos al himno de España–.
Las sanciones propuestas van desde 123.000 euros a la Federación Española de Fútbol como organizadora del evento, 66.000 euros al F.C. Barcelona, 15.000 al Athletic, 100.000 a Catalunya Acción, como instigadora de la pitada, y unos 70.000 al resto de organizaciones que la convocaron.
El asunto, anunciado por el presidente del Consejo Superior de Deportes, Miguel Cardenal, ha sido uno de los temas del día en la jornada de 28 de julio de 2015 en los distintos debates en medios de comunicación. Por ejemplo, en la tertulia matutina de Onda Cero, ‘Más de uno’, con Carlos Alsina, se dieron algunos argumentos curiosos al respecto. Al habla Pilar Cernuda, Anabel Díez, David Gistau y Rubén Amón —ESCUCHE EL AUDIO COMPLETO (a partir del minuto 6)–:
Pilar Cernuda: «A mí me parece bien que se pongan las multas, pero luego no se cobran nunca… Por eso está habiendo tantas faltas de respeto a la ley; y hay que obligar a cumplir la ley, y si no tienes dinero para pagar que se compense con prisión o con trabajos comunitarios… Pero aquí te ponen una multa y te lo tomas a título de inventario».
David Gistau: «Parece que el himno español es el único que hay derecho a vapulear, sin pisar ninguna susceptibilidad personal o milenaria: pues no, hay gente que se lo cree y gente a la que le molesta que se le falte el respeto. Si tú quieres castigar a un club, no lo puedes castigar con dinero, lo que le duele es dejar de jugar, ¡échalo de la competición! ¡O métele partidos! Pero una sanción económica y con el dinero que mueve la primera división, estas multas son de risa, las pagan gustosos. Lo que yo no sé hasta qué punto un club puede ser responsable o no de lo que grita una grada».
Rubén Amón: «Lo que yo no creo que la solución sea poner multas. Es ir al síntoma y no al problema, que tiene mucho más que ver con el civismo y la educación… Y tratar de coaccionar eventuales situaciones como estas a través de la amenaza económica me parece ineficaz, porque además proviene de un organismo que es absolutamente ineficaz; estamos hablando de la Comisión Antiviolencia que depende del CSD, y entre cuyas atribuciones está la de proponer sanciones como lleva proponiendo desde su creación a título prácticamente inútil».