La nueva edición de Supervivientes vuelve a tener a Isabel Pantoja como protagonista. Ya van tres ediciones en las que la tonadillera tiene un papel fundamental en el reality sin poner un pie en Honduras.
Dulce, la que fuera niñera de Kiko Rivera y Chabelita, ha abierto su corazón en el concurso para desvelar cómo entró en la vida de Isabel Pantoja. Y es que el papel de Dulce en el día a día de Cantora siempre ha estado rodeado por un halo de misterio.
Unas incógnitas que podríamos ir descubriendo poco a poco en Supervivientes 2016. Lo primero que ha desvelado Dulce es el comienzo de su relación laboral con la cantante. Mila Ximénez ha sido la partícipe de esta confesión, sacando su faceta más Sálvame.
«Ella vino a Barcelona a dar un concierto, y me fui con ella del tirón», confesaba Dulce. En aquel entonces tenía 18 años y era una auténtica fan de la cantante, por ese motivo no se lo pensó dos veces e hizo la maleta para mudarse con ella a Sevilla con la función de hacerse cargo del pequeño Kiko Rivera de 3 años.
Después de vivir un tiempo en la ciudad hispalense se marcharon a Madrid Kiko, Isabel y Dulce: «Luego nos independizamos en Madrid. La madre de quedó en Sevilla con Agustín».
Unas palabras que no han molestado a Isa Pantoja que se encontraba en el plató haciendo casi la función de defensora de Dulce, aunque ese papel fuese el de su amiga Maca. Para Isa es normal que hable de su pasado con Isabel Pantoja ya que son sus vivencias de juventud, además explicó que su distanciamiento con la cantante vino por la intervención telefónica que hizo para defenderla y no por nada relacionado con Julián Muñoz y el supuesto affaire al que se ha referido Mila en la isla:
Hasta hace un año se llevaban bien, es ahora cuando Dulce salió en defensa mía; eso fue como la explosión.
Respecto a si Isabel ha tenido alguna vez celos de Dulce, Isa respondía muy segura: «Igual celos no, pero sí cuando tuve al niño le hubiese gustado estar más tiempo con él».
