Entre los nuevos fichajes de Rull y su troupe hay algunos moderados como Margarita Saenz Díez o Carmelo Encinas y otros de perfil radical como Ernesto Ekáizer.
La tan anunciada promesa de Cristina Cifuentes de despolitizar Telemadrid, de hacer de la cadena púboica madrileña una especie de BBC castiza con audiencia y prestigio, sigue sin cumplirse a casi un año de haber asumido como presidenta de la Comunidad de Madrid el 25 de junio de 2015 (Telemadrid gastó 19 millones de euros en cinco periodistas y sus productoras).
«Los mismos que llevan una década abrasando la tarjeta de crédito corporativa a base de comidas y se han hartado de hacerle kilómetros al coche oficial, no solo para reuniones ‘oficiales’, siguen con pequeñas excepciones en sus cargos cobrando porque son muy útiles para los que mandan. Aunque los que mandan se llamen Cristina en lugar de Esperanza o Ignacio Agüado».
Es un clamor en los ahora desolados pasillos de la casa y entre los profesionales del periodismo madrileño (Los jefazos de Telemadrid llevan diez años gastando a lo loco en dietas y representación).
«Las audiencias siguen por los suelos, los gastos por las nubes y el prestigio en el vertedero, pero ellos se han salvado de la quema, porque son ‘útiles’ para cualquiera que mande».
Directivos serviles a la anterior gobierno de Esperanza Aguirre como el director general Angel Martín Vizcaíno y el director adjunto de Antena, Alberto Rull, siguen en sus puestos y realizando labores similares (Alipio Gutiérrez tampoco quiere a Cake Minuesa en Telemadrid y cancela su programa).
Parecen incombustibles, a pesar de haber sido señalados por sindicatos y profesionales como los principales culpables de la estrepitosa caída de audiencia y del desprestigio de la cadena, porque siguen siendo ‘útiles‘.
«Eran los comisarios políticos de [Esperanza] Aguirre pero han cambiado de chaqueta y ahora lo son de Cifuentes o de Ignacio Aguado, como lo serán de Podemos o del sursun corda si llega el caso», dicen fuentes internas de la cadena pública a PD (El PP simpático entra en campaña electoral: más dinero a Cataluña y purga de Cifuentes en Telemadrid ).
Rull, que lleva en el cargo desde septiembre de 2011, es hermano de Jaime Rull, hombre fuerte de los informativos de laSexta que tienen en vilo al PP.
Como director de Antena, es la pieza clave en el organigrama directivo en la relación con las productoras. Todo las decisiones en torno a la programación pasan por sus manos (Melchor Miralles niega amiguismo en su contrato con Telemadrid: «Es una canallada»):
«En la etapa de Aguirre, Rull pedía a gritos no dar cancha a Cifuentes y poner a todas horas al violador de Ciudad Lineal», recuerda un ex trabajador de la casa:
«Fue de los que mandó hasta emails con instrucciones concretas y ordenaba a losm programas que se ‘jodiera’ a la entonces candidata del PP, pero cuando vio la que se venía después de las elecciones autonómicas, cambió de chaqueta, patrocinó a nuevos tertulianos y se ofreció para lo que fuera».
Si se mira por el lado de los contenidos políticos, la despolitización sigue brillando por su ausencia.
La salida de tertulianos considerados ‘peperos‘ o ‘conservadores‘ por la actual dirección cifuencista ha dado lugar a la entrada en tropel de tertulianos de ‘progres’ o ‘bizcochafles’.
Entre los nuevos fichajes de Rull y su troupe hay algunos moderados como Margarita Saenz Díez o Carmelo Encinas y otros de perfil radical como Ernesto Ekáizer.
