Si los independentistas viven en una realidad paralela, en ‘Matrix’ como dice Inés Arrimadas, los de la CUP están a otro nivel, algo así como fuera del Sistema Solar.
La cupista Mireia Boya, diputada en el Parlament, es una de esas que empujaron a los líderes de Junts Pel Sí al abismo de la declaración unilateral y después escondieron la mano. Y en esas, con el traslado de las obras de arte del museo de Sijena (Lérida), la de la CUP entró en Las Mañanas de Cuatro para decir todo tipo de barbaridades.
La diferencia de su esta conexión hubiera sido en otro programa de la parrilla habría sido abismal. Nadie se imagina a Ferreras aguantando este tipo de bobadas y trolas descaradas, pero Javier Ruiz tiene a esta diputada como cupista de cabecera para su programa, de modo que se quedó mudo el presentador a pesar del tono chulesco y beligerante de la invitada.
- «¡No pasaréis! Las obras se compraron de forma legal, y la vía judicial no se ha agotado. Nosotros somos un pueblo pacífico y la gente está muy tranquila, aquí el que organizó venir a por las obras incluso utilizando la violencia es el Estado español, el que nos pegó el día 1-O. Los violentos son el Estado español y su poder judicial, que lo único que quieren es que nos arrodillemos y aquí estamos, de pie, ¡no podréis con nosotros!»
- «Se han llevado unas obras de arte pero seguimos aquí. Somos un pueblo soberano y vamos a hacer efectiva esta república para evitar que sigan con este espolio cultural que seguramente seguirá en otros ámbitos: ¿seguirá con la escuela catalana? ¿Seguirá con los medios públicos catalanes?»
¿Y tú, de qué planeta viniste, Mireia Boya? Y Javier Ruiz callado, no vaya a ser que piensen que.