Juan Carlos Monedero es, salvando las distancias, lo que Aznar al PP, Felipe González al PSOE y Julio Anguita a Izquierda Unida; aunque nunca fue secretario general de su partido como éstos, sí es el cofundador de la organización y el gurú de facto del proyecto: «Casi todos los miembros de Podemos han ido alumnos míos», dice.
Además tiene en común con los anteriores que suele aparecer cuando menos le necesitan sus camaradas, y lo hace para dar su opinión y, en el caso de los últimos meses, para ahondar en los conflictos internos del partido.
Este 17 de enero de 2017, entrevistado por Susanna Griso en Espejo Público de Antena3, el otrora tertuliano hasta que le destaparon sus pufos con Hacienda, se ponía más que pedante, pomposo y azucarado recordando que hace justo tres años que arrancó el proyecto podemita:
En aquella mañana estábamos intentando inyectar poesía a la política y yo creo que ahí seguimos, y la poesía no se lleva bien con el poder. Así que me parece genial el espacio que estoy intentando ocupar.
No era, eso sí, la primera vez que el ideólogo podemita recreaba con tanto rosa su proyecto político: Dedícate a la poesía, Monedero: «Vamos a ganar porque somos una máquina de amor».
Bofetón de vuelta a Monedero: «Está desconectado de la lógica de Podemos».
Todo esto lo respondía Monedero a las palabras de Carolina Bescansa en las que dejaba claro que Monedero pinta bastante poco en Podemos. Manotazo de Bescansa a Monedero: «Recuerdo que no tiene ninguna responsabilidad orgánica ahora mismo en Podemos».