Al pobre de Juan y Medio, presentador de ‘La Tarde, aquí y ahora’ de Canal Sur Televisión, no le va a alcanzar lo que le queda de vida para pedir perdón por la inocente broma que le hizo a una colaboradora cortándole la falda con unas tijeras. Qué harían con Martes y 13, o Los Morancos, por hablar del humor de esa tierra.
El subdirector general de la Radio Televisión de Andalucía (RTVA), Joaquín Durán, se ha flagelado en público y ha aseverado que esa institución «rechaza el tono del sketch». «Fue un lamentable y desafortunado error que sobrepasó la idea inicial que era hacer una broma», ha admitido.
que Juan y Medio corta una falda? machista, casposo,… que Pablo Iglesias guiña un ojo? culpa de ella. así es twitter #FuturoCatalunyaARV
— javi martinez gomez (@javimartinezG) 19 de septiembre de 2017
Pero lo mejor vino cuando ha anunciado que el bien pagao Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) organizará cursos de reeducación sobre tratamiento de igualdad en televisión y radio dirigidos a los trabajadores de las productoras asociadas a Canal Sur (que realizan programas para esta cadena). Estas charlas tratan de evitar «comportamientos o situaciones machistas».
Juan y Medio, ¡estás enfermo! pic.twitter.com/qGxxSe3l92
— Nuevo El Paquito (@padiru48_2) 11 de septiembre de 2017
Como bien dice Rosa Belmonte en ABC, «Juan y Medio y sus empleados tienen que recibir clases de saber tratar a las mujeres. Un curso de reeducación en igualdad. Demonios, como las de reeducación vial cuando te quitan los puntos del carnet. Me gustaría más asistir a una de esas clases que a Harvard, donde te puede tocar Chelsea Manning de profesora invitada. Y que aquí no hayamos llevado a La Veneno a la universidad».
De este Instituto Andaluz de la Mujer no tuvimos noticias cuando el concejal podemita de Jaén, Andrés Bódalo, condenado con pena de cárcel por golpear a un concejal socialista, en el verano de 2002 irrumpió junto al Sindicato Andaluz de Trabajadores para cerrar cuantos comercios se atrevieran a abrir desafiando la huelga general convocada para aquel día.
Hoy se acaba de comprobar la sociedad bochornosamente hipócrita y doblemoralista en la que vivimos
Juan y Medio pic.twitter.com/UfkaJUCrsS
— Zélery ? (@Zelery) 8 de septiembre de 2017
Bódalo entró en la heladería de Eva Rico, que por aquel entonces estaba embarazada de seis meses. Rico no tenía ninguna intención de cerrar, ya que vive de su negocio y no se puede permitir el lujo de cerrar un solo día, y menos en verano. Pero pagaría cara la osadía de desafiar a los sindicalistas capitaneados por Bódalo.
Irrumpieron en su negocio y «me insultaron, me llamaron fascista de mierda, me cogieron de la camisa y me llevaron de aquí para allá mientras golpeaban sillas, mostradores, vitrinas. Yo traté de proteger todas estas cosas y al intentarlo recibí los golpes estando embarazada». —El espeluznante relato de la agresión de Bódalo a una embarazada—
Por no mencionar cuando la banda del SAT, con Diego Cañamero, al frente se llevó por delante un Mercadona zamarreando a sus cajeras como puede verse en este vídeo. Pero para la Brigada Feminista estas agresiones no cuentan. Porque son de los suyos y eso los hace intocables.