El presentador de ‘La Sexta Noche’ quiso dar la nota hace un par de días en Twitter para acusar al Partido Popular, sin saberse muy bien a cuento de qué, por no condenar el golpe que desató la Guerra Civil en 1936 (cuando ni Rajoy ni él habían nacido).
En realidad el Congreso de los Diputados en presencia del PP sí lo condenó hace unos 15 años, pero no hay que dejar que la verdad estropee buen un tuit. ¿Verdad, Iñaki?–Twitter acribilla a Iñaki López (laSexta) por criticar que no se haya condenado el golpe de Estado…¡del 36!–.
Tantos que hablan de golpe de Estado y aun no han condenado el del 18 de julio del 36.
— Iñaki López (@_InakiLopez_) 9 de noviembre de 2017
El caso es que cuando a López un tuitero le sugirió mirar al futuro respondió: «Para mirar al futuro hay que hacer justicia con el pasado y no hacerse trampas al solitario. Un saludo».
La referencia a las cartas y a ese ‘solitario’ a algunos nos recuerda a una partida de tute de Azpeitia. Ya que a Iñaki López le gusta tanto la memoria histórica vamos a retroceder al pasado, aunque no tanto, concretamente al 3 de diciembre de 2008, cuando los asesinos de ETA mataron cobardemente al empresario vasco Ignacio Uría por no pagar su ‘impuesto revolucionario’.
A Uría lo asesinaron en Azpeitia, pueblo gobernado por los batasunos (bajo la marca de entonces de Acción Nacionalista Vasca o ANV) y desde varios medios de comunicación se protestó por la pasividad de las autoridades del ayuntamiento ante el crimen y en gran parte de la ciudadanía.
La más impactante fue la portada de El Mundo. Resultó que a Uría le mataron un miércoles, cuando se disponía a ir a jugar una partida de cartas con sus amigos en un bar como hacía ese día todas las semanas.
Los periodistas de El Mundo se percataron de que los amigos de Uría, tras enterarse del asesinato, decidieron celebrar la partida de cartas igualmente sin el asesinado como un día más.
El titular de El Mundo «ETA asesina a un empresario en un pueblo que gobierna… pero la partida continúa» es una de las denuncias más fuertes de la pasividad ciudadana registradas en prensa.
En aquel entonces el siempre ‘neutral’ Iñaki López presentaba junto a Adela González la tertulia estrella de la televisión pública vasca (controlada por el PNV) llamada ‘Pásalo’ donde tenía tertulianos de muchas tendencias incluyendo la pro-etarra que representaba Garibel Ezkurdia.
Ese día Iñaki López como presentador decidió hacer un alegato editorial indignado… ¿adivinan indignado contra quién? ¿Contra la pasividad del alcalde de Azpeitia? ¡No! ¡Contra El Mundo! El programa primero emitió una pieza contra el periódico El Mundo donde una voz en off decía que esa portada «había indignado» a mucha gente y donde José María Bastida (ex alcalde y líder del PNV en Azpeitia) la calificaba de carroñera.
Acto seguido, tomaba la palabra Iñaki López:
Iñaki López: ¡Que El Mundo en aras de la libertad escriba lo que le parezca, pero… ¿es necesario enfadar, indignar?! (…) ¡Con un titular que, creo que definía bien el ex alcalde de Azpeitia, es un titular «carroñero»!. ¡Quizá El Mundo ha pecado de amarallismo. Allá cada uno con su conciencia! Pero ¿calentar la situación política contribuye a algo?
Adela González: Habrá dolido mucho en Azpeitia ese titular (…)
Iñaki López: ¡Es un viejo recurso de la prensa de derechas. Es algo que hemos escuchado mucho en la COPE, escuchamos en El Mundo, ataques contra la sociedad vasca. Hay determinados periódicos que siguen un poquito en la época de El Alcázar!
Uno pensaría que por mucha costumbre que tuvieran de jugar todos los miércoles a las cartas todos los amigos en aquel pueblo de mayoría filoetarra, el hecho de que mataran a uno y la partida siguiera igual era bastante impactante (a pesar de que toda la prensa pro-PNV, con ETB incluida, intentara vender la idea de que el hecho de celebrar esa partida igualmente a la hora de conocer el asesinato de su compañero podía entenderse como un homenaje).
Pues para Iñaki López hacer esa denuncia era fascista ultraderechista (equiparable con El Alcázar), era amarillista y era carroñero.
Una dureza que Iñaki López no usó ese día para reprochar nada, por ejemplo al alcalde de Azpeitia (el batasuno Iñaki Errazkin) que se negó a condenar el asesinato. No, para López era prioritario centrar sus ataques en un periódico que denunciaba pasividad en vez de en los que apoyaban a los etarras.
Afortunadamente para la dignidad periodística ese mismo día sí hubo otro periodista vasco, otro Iñaki, que habló claro en su editorial. Gabilondo, desde el canal Cuatro: «Euskadi es un pueblo que está envenenado (…) los remedios están en los 2.409 votantes de ANV en Azpeitia y en su joven alcalde Iñaki Errazkin, que no se atreven a defender sus objetivos políticos sin ayuda a los asesinos, si se hubieran atretido a decir hoy ‘no’ a ETA, estaríamos en camino de la curación. Pero no. No pueden condenar. ¡2.410 cobardes! La cobardía es la madre de la crueldad».
Un Iñaki defendió ese día la dignidad del periodismo. El otro… que no pedía a ANV/Batasuna que condenara a ETA en 2008 a las 24 horas de que hubieran matado a un inocente a sangre fría, en cambio sí le pide al PP que condene crímenes de hace 80 años. A cada uno le definen sus prioridades (y sus cobardías).
Verdad Mentira #9: Especial Iñaki López, niñera de Podemos en laSexta Noche