Muy divertido ‘pollo’ el que ha liado Carolina Bescansa y su equipo en Podemos, recordando que las heridas de Vistalegre 2 están de todo menos cerradas.
Este 23 de abril de 2018 la podemita -todavía- concedió una entrevista a Ana Pastor en ‘Al Rojo Vivo’ de laSexta para tratar de explicarse mejor sobre ese documento publicado en la red social Telegram que incluía fórmulas de futuro para derrocar a Pablo Iglesias como líder supremo del partido morado. Las tremendas patadas en el culo a la condenada Bescansa al grito de «¡Traidora!»
Todo esto no tiene ni entidad de argumento, fue un borrador… Hace una semana yo ni tenía nada que ver con el proceso madrileño. Después Errejón me llamó y me propuso formar parte como número dos de su lista por Madrid.
Después de eso mi equipo fue elaborando un borrador en el que cada cuál fue aportando lo que consideraba lo importante, pero al decidir mandarme el documento lo mandaron a mi canal de Telegram y se publica.
Dice Bescansa que no quiere quitarse culpa y que lo qu ehace su equipo lo firma ella, pero por si acaso explica cómo se forjó el tema y se quita toda la responsabilidad que puede. El perro de presa de Iglesias despelleja a Bescansa y se ensaña con ella: «Es una mala política»:
Ese documento lo hacemos en equipo, que son personas que colaboran y quieren trabajar en el proyecto. No existe un equipo del aparato del partido pero sí que ofrecen su trabajo militante conmigo. No echo la responsabilidad sobre nadie, quiero asumir que lo que haga mi equipo es como si lo hiciera yo; por eso quiero pedir disculpas a los inscritos e inscritas.
Creo que más allá del nerviosismo inicial, hoy las cosas se ponen en su sitio.
No me ha llamado nadie de la dirección, por eso he entendido que el desenlace que plantearía la dirección hoy sería este.
Una vez fustigada, la que un día ejerció como ‘madre’ en la pelea de Iglesias y Errejón -y salió escaldada por ello- intenta quitarle hierro al asunto, que esto pase cuanto antes, y se hace la loca cuando Ana Pastor le pregunta si piensa dimitir:
Ni se me pasa por la cabeza dimitir, en primer lugar porque no hay motivo. Y es que si yo dimitiese por algo así sería mandar un mensaje a los inscritos en Podemos que si alguien se quisiera postular a cualquier candidatura eso podría acarrearle problemas. Y eso es un disparate.
