La reportera separatista de Telecinco, Mayka Navarro, ha explicado el atestado de los Mossos d’Esquadra sobre la agresión de un hombre que rompió la nariz a una mujer que retiraba lazos amarillos en el Parque de la Ciudadela.
Según la versión del agresor, la agredida le atacó primero y él respondió. Además, el agresor ha explicado que no el incidente no se debió a motivos políticos y que iba a pedir perdón.
Como adelantó Periodista Digital, lo que intenta hacer Navarro y su periódico La Vanguardia es desvincular al brutal agresión a la mujer con el separatismo, para que la opinión pública siga tragando con la revolución de la sonrisas. –Mayka Navarro confiesa en una columna que tuvo un novio maltratador y cómo temió por su vida: «Veía la muerte como la única salida»–
«La agresión no tuvo ninguna connotación política», dijo Navarro basándose únicamente en la versión del agresor, con ella y otros periodistas hablaron.
Navarro justifica eso con el peregrino argumento de que el agresor la insultó «en castellano», lo cual probaría según ella que «no es separatista».
El agresor, al que Navarro se ha referido con compasión como un «hombre que paseaba con su madre de 90 años en silla de ruedas» según ella está arrepentido y explica su agresión a causa de la toma de antidrepresivos.
Eduardo Inda fue el único de la mesa que no tragó con la versión edulcorada de Navarro:
«Pareciera que este hijo de puta tropezó por ahí. Podéis darle las vueltas que queráis. Un hijo de puta que revienta la cara a una mujer se tiene que disculpar pero en la trena».