"Soy consciente de no haberlo hecho bien", declaraba Echenique en el pasado cuando le pillaron con el carrito del helado
María Llapart, sustituta de Antonio García Ferreras en el plató porque el presentador habitual de ‘Al rojo vivo‘ estaba en Barcelona con Manuel Valls, ha dedicado gran parte de su charla con Pablo Echenique a hablar de los trucos fiscales de Pedro Duque.
Echenique no ha dudado en asegurar que el ministro de Ciencia tiene que dar explicaciones, si no las da se las exigirán, y si sigue sin convencerles, le recordarán a Sánchez que prometió expulsar a todo aquel que eludiera impuestos.
El caso es que tras cuatro o cinco preguntas sobre Duque, Llapart se ha visto obligada a recordarle a Echenique sus problemas legales con su asistente, al que tenía en negro y no pagaba la seguridad social.
Lo ha hecho un poco como de corrido, dando la sensación que la cosa era tan flagrante que la obligaba a hablar de ello.
Ahora bien, ha preguntado con tan poca convicción que el podemita ni se ha inmutado, ha salido airoso y encima se ha permitido el lujo de insultar a los medios que destaparon su chanchullo.
Llapart: Señor Echenique, ehh (movimiento nervioso de manos), nos recuerda que usted tenía empleada una persona empleada a su cargo a la que no le pagaba legalmente. También este caso… bueno, usted pide explicaciones cuando usted tuvo un caso donde no pagaba los impuestos que correspondía.
Echenique: No, eso es mentira. Los asistentes personales de las personas dependientes son autónomas porque tienen muchos clientes y porque lo dice la Ley de Dependencia. Eso es un bulo más de los tabloides de extrema derecha pero no es verdad.
Llapart: Lo desmiente usted. Quiero que escuche también al presidente de gobierno…
Hay que recordarle a Echenique que continuando con los mismos argumentos que él y los de su partido aluden, lo suyo con el asistente sería legal -que es lo que mantiene- pero muy ético tampoco parece, máxime cuando habla en esta y otras entrevistas de exigir explicaciones a los demás.
«Soy consciente de no haberlo hecho bien«, admitió por entonces el secretario de organización de Podemos, cuando se supo que tuvo a su asistente más de un año sin contrato y sin pagar la Seguridad Social.
Lástima que Llapart no hubiera revisado bien tan abundante hemeroteca para haber arrinconado con un poco más de contundencia a su invitado.