Para disgusto de muchos, Carmen Lomana no ha sido el centro de la críticas en los últimos programas de Masterchef Celebrity. Lo han sido Antonia Dell’Atte y el favorito Boris Izaguirre. Mucha tensión que ha concluido con un veredicto durísimo del jurado.
El espacio juntó a la italiana y el venezolano para una prueba que consistía en preparar un menú mexicano. Debían olerse que la cosa no iba a ir bien porque antes de ir a la valoración compartieron un abrazo en el que Boris le susurró:
«Fingimos estar encantadísimos».
Los dos estaban muy sonrientes al ver al jurado, pero (a Boris parecía que se le iba a partir la cara), y defendieron su menú falto de un plato como un homenaje al «minimalismo» en el que querían transmitir su «histrionismo», pronto se les borró la sonrisa.
«Los dos somos grandes histriones y los histriónicos tienden a ser muy individuales. La idea de equipo no se pudo formar de ninguna manera porque cada uno estaba centrado en su histrionismo».
Antonia ha querido negarlo categóricamente, con una gran sonrisa forzada, el venezolano ha añadido:
«Un poquito sí».
Soltaba ella con una sonrisa muy tensa:
«Amore, tenemos que tener más conocimiento de la cocina».
«No, pero tú tienes muchísimo», ha respondido Boris con ironía.
«Vamos a probar, que va a ser breve», avanzaba Jordi Cruz. Y breve ha sido, ni siquiera lo han probado. Nada más abrir las flautas que habían hecho, el jurado ha estallado de indignación.
«Qué falta de respeto», «creo que empezasteis mal, y vamos a peor», «me dan ganas de echaros ahora mismo sin prueba de eliminación, os pondría un delantalito negro que os quedaría de 10″… Los comentarios han sido de los más duros que se han oído esta edición.
«Hay muy poca vergüenza en tanto tiempo no haber realizado algo más serio», ha sentenciado Pepe Rodríguez.
«Vergüenza, una falta de respeto. Esto ha sido un pitorreo», calificaba por su parte Samantha Vallejo-Nágera»
