La reunión entre Oriol Junqueras y Pablo Iglesias en la prisión de Lledoners prevista para primera hora de la tarde de este 19 de octubre de 2018 ha centrado la actualidad política española durante los últimos días, dado que de ese encuentro parecían depender el OK para el proyecto de presupuestos generales de Pedro Sánchez y los podemitas. El autozasca que revienta al ahora super escoltado Iglesias: «Los policías son matones al servicio de los ricos».
Pero apenas horas antes de la visita de Iglesias a la cárcel a ver al líder preso preventivo de ERC, el podemita reconocía en Antena3 que la reunión que van a celebrar es un poco una filfa, puro postureo, porque los de Esquerra piden un gesto al Gobierno y saben que no pueden conceder nada más que la imagen de que estos presupuestos de izquierdas se han negociado en una cárcel.
Pablo Iglesias y Rufián se picaron de lo lindo durante la semana, pero todo parece haber formado parte del mismo postureo. En ‘Espejo Público’ de Antena3, Pablo Iglesias entrevistado por Susanna Griso, reconoció algunos detalles que hacen pensar que la reunión no vale para nada:
El objetivo tiene que ser hablar, yo voy a la reunión sobre todo a escuchar. ¿De qué se va a hablar exactamente? Bueno, no lo sé. Vamos a escuchar. Yo entiendo que va a haber una cuestión encima de la mesa y es que ellos no están cómodos, que quieren salir de la cárcel y que seguramente es difícil de sostener jurídicamente la prisión provisional porque no hay riesgo de fuga ni de destrucción de pruebas.
También tiene sentido hablar de política, es lógico que hablemos de Cataluña y de España, pero a priori no hay orden del día. Después de la reunión podré contar de lo que se ha hablado.
No parece muy sensato pedirle a un Gobierno que presione a la Fiscalía, porque si tal cosa ocurriera los resultados serían los contrarios… Como miembro del poder legislativo no le puedo decir al judicial lo que tiene que hacer.
¿Qué puedo hacer yo? Puedo hablar con ERC de política, de cambios en España y en Cataluña, de nuevos horizontes. En esto todos tenemos que aprender a ser prudentes e inteligentes.
En nombre del Gobierno negocia el Gobierno, en nombre de Podemos, negocia Podemos, y en nombre de ERC, negocia ERC, y todos somos actores políticos que hacemos política.
Traduciendo: Pablo Iglesias va a Lledoners a ver a Junqueras porque eso es un gesto en sí mismo, y tenemos un país en el que los presupuestos generales comunistas se aprueban en un vis a vis de la cárcel.