El directo es lo que tiene; puede suceder cualquier cosa. Surrealista el momento que se ha vivido en directo en Noticias Cuatro Fin de Semana, presentado por Roberto Arce y Marta Reyero cuando han conectado con el periodista freelanceÁngel Sastre para que contara, desde Argentina, cómo se estaba viviendo la suspensión de la final de la Copa Libertadores, según recoge Pablo Machuca en huffingtonpost.
Sastre ha aparecido en las inmediaciones del estadio Monumental de River Plate, donde debía disputarse el encuentro entre los ‘millonarios’ y Boca Juniors. Pero su estado distaba mucho de ser el habitual de un periodista cuando está en directo en televisión.
Cuando Arce conectó con él y le preguntó «qué está pasando», Sastre estaba girado, sin mirar a la cámara y riéndose.
«Estás con aficionados del River y veo que en un clima bastante más distendido que ayer», dijo el presentador, que ya se olía que la cosa iba a ser entretenida.
Pero igual no tanto. Porque Sastre apenas podía articular una frase completa.
«Sí, sí. Estamos con aficionados de River… Hoooola, qué tal, ¿cómo estáis?», comenzó a decir el periodista, que no lograba mirar a la cámara directamente.
«La verdad es que es lo último que queda de la afición… tranquilidad», dijo el periodista al ver que los pocos aficionados que lo rodeaban comenzaban a cantar. «Estamos aquí con algunas hermosuras… por favor, acércate un poquito», dijo a una madre que sostenía a una niña pequeña en sus brazos. «No tenemos mucho tiempo…, mirad, mirad qué lindo», dijo el periodista dando la espalda por completo a la cámara.
Acto seguido se dio la vuelta y dijo:
«No queda mucho de la afición. Ya sabéis que ahí se están barajo…». En ese momento, Sastre se vuelve a girar para mirar a los aficionados mientras trataba, a duras penas, de concluir la frase:
«Se están barajando fechas. Están barajando fechas en diciembre. Y bueno, ya sabéis cómo es esto, un caos totalmente en el fútbol argentino, ya veis lo poco que queda de la afición en Buenos Aires y… y vamos a esperar porque, la verdad, me encantaría poderos explicar lo que está pasando aquí pero no lo puedo hacer, o sea… Bah, ellos tampoco pueden explicarlo, ¡JA! Bueno, bueno, vamos a cortar».
Y sí, cortaron. Y cuando la imagen volvió a plató se pudo ver a Arce haciendo un gesto con la mano como de «ya es suficiente». En su rostro, la incredulidad más absoluta. Y una risotada a punto de salir de su boca.
«Bueno, ese es el ambiente que se vive ahora en el estadio, muy diferente, como decíamos, a lo ocurrido ayer a estas horas».
