Política-espectáculo en Cuatro.—Vasile se abraza al show más chorra: cierra sus informativos de Cuatro mientras estrena por todo lo alto a Risto riéndose de noticias falsas… —
A Paolo Vasile no le disgustaba la política. Lo que le molestaba al jefe de Mediaset en España era cómo la trataban los informativos, que acabó eliminando.–Guerra interna en Mediaset: la nueva fórmula de Vasile para mantener viva la moribunda cadena Cuatro—
Pero a la vez que decretaba el fin de los telediarios alumbró en su segundo canal otra forma de tratar la información política, esto es, ‘salvamizándola‘.–En Atresmedia tocan a rebato contra la gran apuesta de Vasile: Monegal llama tramposo a Risto Mejide y dice que sus reflexiones «no se las cree ni él»—
Si algo ha funcionado con el corazón y la actualidad rosa, por qué no lo va a hacer con algo un poco más farragoso si se le da el tratamiento ‘adecuado’ (para sus intereses).–Losantos desvela las mareantes cifras que ha costado a Vasile contratar a la ‘superviviente’ Pantoja—
La ‘politainment‘ (o «infoentretenimiento») fue pionera en Estados Unidos, y desde allí ha desembarcado en el resto de países como si de un McDonalds se tratara.
Esta tendencia triunfa junto a la progresiva mediatización de la política y de la sociedad y pasa por el tratamiento frívolo, dramático y superficial de la información.–Paolo Vasile ‘pasa’ de las elecciones del 26 de mayo y no programa especiales en Mediaset—
Como explica la profesora de Comunicación Política, Salomé Berrocal, este movimiento provoca que los contenidos menos serios triunfen y se impongan sobre otras noticias más difíciles de comprender.
Los efectos son devastadores: dramatización, teatralización, primacía de la imagen sobre cualquier otro contenido. Todo vale con tal de captar a la audiencia. Pero sin perder de vista un fin casi tan importante como el rendimiento comercial: ridiculizar a la derecha.
El mejor ejemplo lo vivimos este lunes 27 de mayo de 2019 en Cuatro, en dos los programas nuevos que llegaron con la intención de sustituir a los tradicionales informativos, de los cuales Vasile renegó: ‘Todo es mentira’, con el publicista ahora reconvertido a regenerador del periodismo Risto Mejide, y ‘Cuatro al día’, de Carme Chaparro, precisamente una de las presentadoras de los extintos telediarios del canal.–Bombazo: El informe de Vasile para despedir a Chaparro y a media plantilla de Cuatro—
En ‘TEM’ se sirvieron de una lamentable agresión de un miembro de seguridad de VOX a uno de sus reporteros para obsequiar al espectador con una alta dosis de teatralización hasta el absurdo.–Una ‘esbirrilla’ de Risto Mejide se lleva un revolcón inolvidable al intentar buscarle las vueltas a Hermann Tertsch—
Cebos, cuñas…lo que hiciera falta para mantener la atención del espectador, al que algún ingenuo estudioso llamaba ‘ciudadano-elector’ en los manuales de comunicación política clásica.
«Después de la publicidad, la secuencia completa de la agresión«, rezaban los anzuelos del programa. Que nadie se quede sin su ración de morbo, pero antes pase por caja y se trague los anuncios generosamente pagados.–Risto Mejide se sirve de una lamentable agresión de un miembro de VOX a uno de sus reporteros para aumentar la audiencia y hacer un ejercicio de cinismo—
La cosa no quedo ahí. En el espacio que viene a continuación del de Mejide, el de Chaparro, contaron con el reportero agredido durante la noche electoral en la sede de VOX para que explicara con pelos y señales lo que ya había contado junto a Risto. Poco importaba en ese punto los resultados de las urnas del día anterior.
Se trata de entretener, a la vez que se viste el contenido de una sana intención de informar, que en realidad no es tal. Caretas fuera.